La tecnología comunicacional ha logrado cosas impensables en estos últimos 20 años, una de las más sorprendentes para aquellos que crecieron creyendo que las cartas eran la única manera de enviar un mensaje a una persona que está muy lejos son: la mensajería instantánea y sobretodo las redes sociales, que se han vuelto imprescindibles en el día a día de muchos (y me incluyo) por haberse convertido en nuestra fuente principal de información.

Estas tecnologías han sido capaces de acortar distancias, al permitirnos la interacción con personas que están a miles de kilómetros, dando plataformas muy buenas para compartir nuestra cultura, saberes y sentimientos y hoy quiero hablar de un sentimiento predominante, el dolor.
Ocurren eventos y situaciones que no podemos sentir ajenas a nosotros, gracias a la influencia del internet en nuestras vidas, todo se siente más cerca, más fatídico, y con la imparable globalización cada vez sentimos más qué estás tragedias podrían pasarnos a nosotros.
Imagina que te levantas en la mañana, desayunas, vas a clase o al trabajo, y piensas que tu día transcurrirá como muchos otros de tu vida, pero no. Aparece un pistolero, un hombre con una bomba, un simple conductor de camión o incluso de un auto cualquiera. Todos estos con la intención de hacer daño y nada más.
Lo hemos vivido tantas veces, juntos, aun estando lejos. Y no puedo hoy, ni podré jamás, sentirme distante de una situación así, porque incluso cuando nos separan océanos, puedo sentir su dolor y sufro cada injusticia al igual que las víctimas.
No sé si es un don o una condena el sentir tanta empatía, pero es parte de quien soy y de la forma en que intento de hacer de este mundo un lugar mejor para todos. Un planteamiento bastante cliché pero fundamental para mí.
Porque somos humanos, porque somos jóvenes, estudiantes, trabajadores, porque tenemos familia, amigos, pareja y cada día hay personas que pierden eso gracias a la violencia. Y porque existe la posibilidad de que me pase.

No te olvides de votar @cervantes como witness en esta página: https://steemit.com/~witnesses
Me gustaría saber si se han sentido conectados de alguna forma a las tragedias ajenas o si son tan sensibles como yo y nos leemos por ahí. 