Para aprender cómo hacer pan casero no necesitas más que cuatro ingredientes básicos, por demás económicos, que componen la despensa de cualquier hogar: harina, agua, sal y levadura, más adaptar a tu propio estilo de cocinar esta sencilla receta que podrás ir perfeccionando a medida que la pongas en práctica. Si no te sale perfecto a la primera, no desesperes, la paciencia y el ensayo hacen la maestría.
Ingredientes para fabricar pan en casa
- item500 g de harina de fuerza*
- item10 g de levadura seca o fresca**
- item300 g de agua tibia
- item10 g de sal.
Prepapacion
Desgranando con ayuda de los dedos, vierte la levadura sobre el agua y déjala reposar durante unos 10 minutos. Mientras tanto, coloca en un bowl la harina y esparce sobre ella la sal.
Abre un agujero en el centro de la harina y poco a poco derrama sobre ella el preparado de agua y levadura. Mezcla todo en sentido circular con ayuda de tus manos, hasta unificar los ingredientes y lograr que la mezcla se despegue de las paredes del bowl.
Amasa:
Prepara una superficie plana y lisa con harina espolvoreada. Extiende aquí tu masa usando una mano que la sostenga con firmeza, al tiempo que la otra la ensancha hacia un costado. Estírala de ese modo y enseguida dóblala sobre sí misma, de manera que quede como un bulto sobre el que puedas repetir la misma operación. Estira, dobla, estira, dobla… ameniza la tarea tarareando tu canción favorita porque esto deberás hacerlo sistemáticamente durante unos 15 minutos. El resultado deberá ser una masa homogénea y suave.
Hornea:
Coloca en la base del horno una nueva bandeja con el contenido de una taza de agua y precalienta el horno a 250°C. Antes de introducir la bandeja donde reposa la masa, traza una o varias incisiones poco profundas sobre su superficie. Introduce en el horno y enseguida atomiza su interior con un poco de agua. Pasados los primeros 20 minutos de cocción retira la bandeja con agua de la base del horno, baja la temperatura a 200°C y deja cocinar por 15 minutos más. Transcurrido este tiempo, golpea la superficie del pan con los nudillos y comprueba que suene hueco. ¡Ya Está listo para salir del horno!