Ayer fue uno de los días más importantes dentro de mi carrera profesional. Hace días venía comentando mi discusión de tesis , los diferentes negocios y proyectos en que estaba incursionando y hoy fue precisamente la graduación de este gran importante curso de Gestión de Negocios.
Hoy se nos abre una puerta enorme a este mundo que encontramos tan fascinante de las negociaciones , donde podemos implementar todo estos conocimientos que adquirimos, a través de este largo año con nuestros profesores. Que estuvieron acompañando en cada proceso para lograr de nosotros una mejor persona.
Fue un día de nostalgia donde nos reunimos por última vez, quizás el destino nos vuelva a topar en otros cursos , en otros espacios o en otros proyectos , pero hoy culminamos una etapa importante donde nos sentimos satisfechos con estos nuevos procesos. Quizás la vida nos una otra vez a este grupo que durante un año entero nos acompañó y fueron nuestros compañeros de trabajo y de proyectos.
A ellos también hay que darle las gracias por mantenerse todo el tiempo en el curso, porque querer salir adelante. Porque sí , durante un año entero de curso hubo momentos en el que nos cansamos, en los que no queríamos levantarnos para ir temprano a las clases, en el que nos dormíamos en el aula, dónde a veces no entendíamos el contenido y teníamos que preguntar una y otra vez.
Pero todo eso fue parte del proceso.
El acto no dejó de sorprendernos con la cálida bienvenida que nos recibieron para entregarnos a cada uno los títulos . Aquellos que nos llenaron de lágrimas los ojos al ver nuestros nombres y nuestro certificación de notas.
El acto fue acompañado con música entre risas, entre cálidos discursos de nuestros profesores, y con esa mágia que caracteriza cada uno de ellos en sus diferentes idiomas.
Nuestro profesor de inglés nos enseñó esas nuevas terminaciones que nos faltaban para darle acabado a nuestros discursos.
Nuestro profesor de formación humana nos enseñó ese código de ética y protocolo que debemos tener ante toda empresa o todo negociación.
El profesor de francés nos dejó su marca en esas cálidas clases acompañadas de dinamismo y práctica.
Y no podía faltar nuestro profesor de gestión de negocios que nos enseñó a proyectarnos seguro y a estar claro en todas nuestras negociaciones, a ser un líder y a velar por nuestros proyectos y su calidad.
Debemos agradecer a todos aquellos participas de este nuevo logro. Debemos agradecer a todos esos amigos que estuvieron en cada momento, familiares que nos acompañaron en este día para celebrar el logro.
Y por supuesto que no podía faltar terminar nuestro acto con un pequeño brindis entre esos amigos cercanos que siempre estuvieron. Nuestro pequeño brindis fue en el casagranda celebrándolo entre cafés conversaciones y actualizaciones de nuestras vidas. Con esas única forma que sabemos compartir íntimamente con ese círculo estrecho.
Esperemos que vengan nuevos logros esperemos que vengan propósitos nuevos.