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No entraré en detalles, pero desde mediados de abril mi vida dió un cambio que nunca esperé. No hay preguntas, porque las respuestas serían muy injustas, injustas para aquellos que pasan cosas peores también y sin un por qué.
En los últimos años he recorrido muchos centros médicos, papeleos terapias, más papeleos y citas médicas. En los últimos meses sigo recorriendo los mismos lugares y otros nuevos, pero en diferentes pasillos y pisos, con más papeleos y más cansancio, sin embargo trato de ver más allá del proceso, busco ver el propósito. ¿Fácil? No lo creo, pienso que muchas veces quienes debemos actuar en el rol de cuidador quedamos como un estado de coma, por así decirlo. Quedamos sumergidos en un tiempo y espacio donde sabemos que debemos actuar, pero no terminamos de asimilar las cosas.
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La semana pasada pasé 4 días, saliendo y entrando de un hospital, la maquina de café se volvió mi mejor amiga en las noches frías y en la solitaria sala de espera, donde ella me servía el café mientras yo le hablaba y subía nuevamente a la sala de hospitalización. Incluso aprendí a usar una maquina de bombeo xD, no me pregunten cómo, pero soy muy observadora. Y mientras esto ocurría trataba de grabarme el nombre de las enfermeras y hacerme amiga de los vigilantes, para la próxima visita que será pronto y seguirá siendo así por algún tiempo.
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Algo que hago mientras estoy allí es aprovechar los tiempos: ayudo a otros, colaboro con el que puedo, medito, agradezco, sonrío y aprendo a valorar cada día más la vida. Tomo fotografías que quizás algún día sean publicadas, borradas o simplemente queden como el mal recuerdo de lo que fue este tiempo.
¿Quejas? Ninguna. Mucho que agradecer, por cada trato, por cada cita, por cada atención y por cada vez que una puerta se ha abierto en pro de nosotros, brindándonos oportunidades que pocos tienen y haciendo la odisea más llevadera. Pienso que algún momento el mar se vuelve violento ante la tormenta, pero aún así mientras sostienes el timón puedes ver hacia lo lejos y notar que la calma está cerca. Mientras tanto, sigo recorriendo esos pasillos y estando aquí.
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![English Version]
I won’t go into details, but since mid-April my life has taken a turn I never expected. There are no questions, because the answers would be very unfair—unfair to those who go through even worse things, also without a reason.
In recent years, I have gone through countless medical centers, paperwork, therapies, more paperwork, and medical appointments. In recent months, I keep visiting the same places and new ones, but in different hallways and floors—more paperwork and more exhaustion. Still, I try to look beyond the process; I seek to see the purpose. Easy? I don’t think so. I believe that many times, those of us who must take on the role of caregiver end up in a kind of coma, so to speak. We become submerged in a time and space where we know we must act, but we never fully process what’s happening.
Last week, I spent four days going in and out of a hospital. The coffee machine became my best friend on those cold nights in the lonely waiting room—she served me coffee while I talked to her before heading back up to the hospital ward. I even learned how to use a pumping machine xD—don’t ask me how, but I’m very observant. And while all this was happening, I tried to memorize the nurses’ names and befriend the security guards, for the next visit, which will be soon and will continue for some time.
One thing I do while I’m there is make the most of my time: I help others, offer a hand where I can, meditate, give thanks, smile, and learn to value life more each day. I take photos that may one day be published, deleted, or simply remain as the bitter memory of what this time has been.
Complaints? None. So much to be grateful for—for every gesture, for every appointment, for every bit of care, and for every door that has been opened for us, offering opportunities that few have and making the odyssey more bearable. I believe that at some point, the sea grows violent during the storm, but even so, as long as you hold the helm, you can look ahead and notice that calm is near. In the meantime, I keep walking those hallways and being here.
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