The power of Being

Rituals are an important part of being human from the moment we open our eyes to the world. It is a way to invoke the power of higher forces to honor the divine and, at the same time, to exercise our own inner forces to propel growth and the will to create "miracles" in our lives based on faith.

So, it can be said that there is a direct relationship between beliefs and rituals. The society in which man is immersed will have a great influence not only in his beliefs and rituals but also in the conformation of his inner world externalized in the praxis of his being.

For this reason, culture varies according to the regions of the planet, but in the end, the divine is worshipped in any of its manifestations and, with globalization, a gear was activated that moves and links different cultures creating a multiracial and cultural braid that allows a web of beliefs and rituals that enriches the collective psyche.

The question that @ecotrain asks: "Share a ritual that you perform or know about", us this week makes us dig into our foundations to shake our cultural roots to compare them with the exercise of living according to what we are and believe as integral people.

The power of being yourself

What energizes the human being also allows him to create and recreate moments of connection with the Universal Supreme Being, whatever it is called according to the prevailing culture. The divine spark activates an accumulation of power that man treasures within himself and is often unaware of.

Nevertheless, the man conscious of the power insufflated by God within him recognizes, values, and honors his beliefs as part of his growth and development as a spiritual being and integral.

In particular, I respect the beliefs and rituals of each culture, but I voluntarily add my individuality to a collective whole that dwells in everything and everyone, which only needs to be invoked with creative thought to manifest itself. This makes me disregard the superstition and superstition of many religions and, rather, believe in simple rituals that start from every day, as well as consciously cleansing the body with fresh water being aware that this natural water has the power to cleanse and nourish my other bodies, reunifying my being, because everything physical is capable of influencing the mental and spiritual and vice versa.

I thank life, before I close my eyes each night, for the daily opportunities to exercise the power to be a person with the potential to improve myself and my environment.

Monks by Sasint in Pixabay

The power of being oneself with others

The energetic connection through thought provides me not only a conscious and loving penetration into my inner being, but also makes possible the expansion towards kindred spirits, forming a network for something that I am not clear what it is, but it compensates the soul of so much reality and sister souls that recognize each other without knowing each other and do not encourage encounters beyond the sacred miracle of feeling part of the same Being.

Being aware of our inner power makes us more aware of the power of others, which is the same power that manifests itself not only in Love but also in Respect, Trust, and Faith.

And, here is my favorite ritual: Being and Being with the Family sensing God as a unifying force that is always with us even if we do not invoke him because his omnipotent, omniscient and omnipresent essence comforts and encourages our spirit, our thoughts, and emotions in conjunction with the intentions of our heart. God is in everyone and everything unifying, gathering, linking, connecting and it is that connection that makes us parts of the same Being.

Prayer by Reenablack in Pixabay

El Poder de Ser

Los rituales constituyen una parte importante del ser humano desde que abre los ojos al mundo. Es una forma de invocar el poder de fuerzas superiores para honrar lo divino y, a la vez, de ejercitar nuestras propias fuerzas internas para impulsar el crecimiento y la voluntad de crear “milagros” en nuestras vidas partiendo de la fe.

Entonces, se puede decir que hay una relación directa entre las creencias y los rituales. La sociedad en la que esté inmerso el hombre tendrá una gran influencia no sólo en sus creencias y rituales, sino en la conformación de su mundo interior exteriorizado en la praxis de su ser.

Por eso, la cultura varía de acuerdo a las regiones del planeta, pero en el fondo se rinde culto a lo divino en cualquiera de sus manifestaciones y, con la globalización, se activó un engranaje que mueve y enlaza diferentes culturas creando una trenza multirracial y cultural que permite un entramado de creencias y ritos que enriquece la psique colectiva.

La pregunta que nos hace @ecotrain esta semana, "comparte un ritual que realices o conozcas", hace que hurguemos en nuestros cimientos estremeciendo nuestras raíces culturales para cotejarlas con el ejercicio de vivir de acuerdo con lo que somos y creemos como personas integrales.

Light by Reenablack in Pixabay

El poder de ser uno mismo

Lo que energiza al ser humano también le permite crear y recrear instantes de conexión con el Ser Supremo Universal, llámese como se llame según la cultura reinante. La chispa divina acciona un cúmulo de poder que el hombre atesora en su interior y muchas veces desconoce.

No obstante, el hombre consciente del poder insuflado por Dios dentro de él reconoce, valora y honra sus creencias como parte de su crecimiento y desarrollo como ser espiritual e integral.

En lo particular, yo respeto las creencias y ritos de cada cultura, pero voluntariamente sumo mi individualidad a un todo colectivo que habita en todo y en todos, que sólo necesita ser invocado con el pensamiento creativo para manifestarse. Eso me hace desestimar la superchería y la superstición muy propias de muchas religiones y, más bien, creer en los rituales sencillos que parten de lo cotidiano, como limpiar conscientemente el cuerpo con agua fresca siendo consciente de que esa agua natural tiene el poder de limpiar y nutrir mis otros cuerpos, reunificando mi ser, pues todo lo físico es capaz de influir en lo mental y espritual y viceversa.

Yo agradezco a la vida, antes de cerrar los ojos cada noche, por las oportunidades diarias de ejercitar el poder de ser una persona con el potencial de mejorarme y mejorar mi entorno.

Lights by JillWellington in Pixabay

El poder de ser uno mismo con otros

La conexión energética a través del pensamiento me proporciona no sólo una penetración consciente y amorosa en mi ser interior, también posibilita la expansión hacia espíritus afines, conformando una red para algo que no tengo claro qué es, pero resarce al alma de tanta realidad y hermana almas que se reconocen sin conocerse y no propician encuentros más allá del sagrado milagro de sentirse partes de un mismo Ser.

Ser conscientes de nuestro poder interno nos hace más conscientes del poder de los otros que es un mismo poder que se manifiesta no solo en el Amor, sino en el Respeto, la Confianza y la Fe.

Y, he aquí mi ritual favorito: Ser y Estar con la Familia sintiendo a Dios como una fuerza unificadora que siempre está con nosotros aunque no lo invoquemos porque su esencia omnipotente, omnisciente y omnipresente conforta y alienta nuestro espíritu, nuestros pensamientos y emociones en conjunción con las intenciones de nuestro corazón. Dios está en todos y en todo unificando, reuniendo, enlazando, conectando... y es esa conexión la que nos convierte en partes de un mismo Ser.