Temporal, todo es temporal…
El mes pasado hice una lista de ideas sobre el tiempo. Y hoy revisándolas decidí tomar la última. Aprovechando la festividad, me vino a la mente la idea de cómo Temporalmente todo mundo manifiesta alegría, armonía, cierta paz, mucha benevolencia, etc, etc.
Las festividades traen consigo una alegría que parece llenar el aire. Sin embargo, esta euforia es pasajera, y pronto la rutina vuelve a tomar su lugar, esperando la próxima celebración. Si pudiéramos ver una gráfica de nuestras emociones a lo largo del año, veríamos picos de felicidad en momentos como la Navidad, el Día de las Madres o las graduaciones.
Recuerdo una Navidad en particular. Con mucho entusiasmo, preparé un pavo relleno, siguiendo una receta del restaurante donde trabajaba. Era la primera vez que horneaba algo así, ya que mi madre solía evitar el horno para ahorrar gas. Sin embargo, esa noche terminó en una discusión familiar que empañó mi entusiasmo.
Afortunadamente, la vida también me ha regalado muchas celebraciones felices. Como aquella Navidad, años después, en la que mi madre irradiaba alegría porque todo había salido bien.
Todo es temporal, y en esa brevedad debemos aprender a valorar los momentos que llenan nuestra vida de alegría.
¡Feliz Navidad y que nada nada opaque sus celebraciones!
Diciembre de 2024.
aljif7