Nostalgia and coffee. + Nostalgia y café. [Eng+Spa]

The “El Peñón” coffee processing company was founded in Caracas (Venezuela), in 1947. Its initial headquarters were in the industrial neighborhood of “Los Flores de Catia.” It successfully focused on producing high-quality roasted and ground coffee, and its founder (L. N. Díaz García) devoted all his efforts to this goal.
Over the decades, this coffee company established a recognizable place among the country's coffee companies and sought to expand internationally. From what I've read, it was doing quite well during the golden decades of the 20th century's oil boom, but I lack current data on the international market for this brand.
I've known this coffee brand for decades. And I remember a couple of things that caught my attention at the time. One of them was that, in the late 1980s, they launched a vacuum-sealed coffee packaging version. This made the coffee package look as solid as a brick.
As it turns out, this wasn't a good thing. It's traditionally believed that a package of coffee powder that's hard is damaged. So the company had to launch a full-fledged educational campaign on TV and an advertising campaign, but management didn't see that the public would get used to the vacuum-sealed version, despite its advantages. For this reason, they decided to produce a small portion of their production in vacuum-sealed packaging and another portion (the majority of their production) in a traditionally packaged version, with an air bubble inside the packaging.

But I think what I remember most fondly are some advertisements the company produced in the early 1990s to promote this coffee on TV and in Cinemas. And that led me to share a couple of these short videos that capture them.

That's why, when I was shopping today and saw the packaging, the now-traditional advertising phrase came to mind: “Black, with milk, or brown, El Peñón is tastier.” (In Spanish, it is a consonant rhyme).
And I decided to buy a package, out of nostalgia, and also out of curiosity to see if the flavor I remember matches. Well, I've seen cases where companies have changed the recipes of their products over the years, and it may be that the coffee I fondly remember no longer exists.
Since I still have some coffee left, I'll have to wait a few days to open this package and check things out. I hope the flavor I remember is in that future cup, and I can sit down for a while to enjoy a memory that stimulates my taste buds.

Hoy salí de casa para hacer unas diligencias, necesitaba ir a un banco, y decidí aprovechar de comprar un par de víveres en el camino de regreso a casa.
Una de las cosas que compré fue elegida por pura nostalgia. Sucede que vi un empaque de café que tenía tiempo sin ver. No es que sea un producto escaso, sino que yo no he salido mucho de compras, y donde yo suelo comprar no tienen esa marca en venta.
Se trata de Café “El Peñón”.

La empresa de procesamiento de café de “El Peñón” fue fundada en Caracas (Venezuela), en 1947, su sede inicial fue en el barrio industrial “Los Flores de Catia”. Se apuntó con éxito a la preparación de un café tostado y molido con un alto nivel de calidad, y su fundador (L. N. Díaz García) consagró todos sus esfuerzos por este fin.
Con el pasar de las décadas, esta empresa de café se hizo de un sitio reconocible entre las empresas cafetaleras en el país, y procuró su internacionalización. Hasta donde leí, lo estuvo haciendo bastante bien en las décadas de oro de la bonanza petrolera del siglo XX, pero me faltan datos actuales del mercado internacional de esta marca.
Yo conozco esta marca de café desde hace décadas. Y recuerdo un par de cosas que me llamaron la atención en su momento. Una de ellas fue que, a fines de los años 80, pusieron en el mercado una versión de empaque de café sellado al vacío. Eso hacía que el paquete de café pareciera tan sólido como un ladrillo.
Sucede que eso no fue bueno. Es tradicional percibir que un paquete de café en polvo que está duro es porque está dañado. Así que la empresa tuvo que hacer una verdadera campaña educativa en TV, y una campaña publicitaria, pero la directiva no vio que el público se acostumbrara a la versión sellada al vacío, a pesar de las ventajas que tenía. Por este motivo, decidieron hacer una pequeña parte de la producción con el empaque sellado al vacío y otra (la mayor parte de la producción) en una versión envasada de manera tradicional, con una burbuja de aire dentro del empaque.

Pero creo que lo que recuerdo mejor, y de manera grata, son algunas de las publicidades que la empresa produjo a inicios de los años 90, para promocionar este café en TV y cine. Y eso me llevó a compartir un par de estos videos cortos que los registran.

Por eso, cuando hoy estaba comprando, y vi el empaque, se me vino a la memoria la frase de propaganda que ya le es tradicional: “Negrito, con leche o marrón, más sabroso es El Peñón”.
Y me decidí a comprar un paquete, por la nostalgia, y también por la curiosidad de ver si el sabor que recuerdo coincide. Pues, he visto casos en que las compañías han cambiado las recetas de sus productos con los años, y puede que el café que yo recuerdo con cariño, ya en realidad no exista más.