Life is a constant struggle, each day brings its difficulties that we must overcome, but they are already problems that we are used to having and we know what to do.
The struggle of life becomes bigger when unforeseen things like an accident arise, it is something that many times we do not know how to handle and only by not letting ourselves be carried away by fright and fear we can overcome.
Prejudge the country for everything I heard in Venezuela and movies I saw on television about guerrillas and drugs, but my curiosity and the desire to get out of the situation my country was going through during the dictatorship led me to emosi-nation to take a trip. and also because it was what touched me.
Upon reaching Maicao we boarded the bus that would take us to Bogotá, the capital of Colombia. Everything was beautiful, different from my country that was already parched by the lack of agus, here everything was green, rebirth, big trees, crops, extensions of land all full of grass.
Everything was going well, we had been 8 hours on the road and night had already fallen. I don't like sleeping on trips but there was a moment that I think I closed my eyes. When I felt that the bus was moving from one side to the other and I woke up, when I looked forward I saw that some lights were spinning and that was when I knew we would have an accident. I put my hand on my son's knee and said: "It is an accident, my God", after that I didn't know anything else.
I woke up listening to what they said to me: "Mom, Mom". My son tells me that he called me for a long time, until he saw that I woke up. He helped me to my feet, he took some chairs out of the way and together with other men they broke the front glass of the bus since he had been lying on the side of the exit door
I walked hand in hand with my son, all dazed and I felt like floating, but I could see the faces of the other passengers who were astonished to see me, I was all bloody and my son had blood on his face from minor injuries he suffered.
Immediately an efficient ambulance arrived, which took 4 people to the nearby healthcare center. He made several trips to bring them all. My son kept taking out some of the hand luggage, my briefcase, my phone and my laptop. Nothing was lost. First good point in favor of the people of Colombia.
The company had another bus available for those who wanted to follow the path, after being treated at the hospital. I had to stay because I would be transferred to Medellín since I needed a surgical intervention with a Plastic Surgeon, since I suffered a scalpel, loss of part of the scalp
In the early morning my son and I were taken by ambulance to Medellin, it is like a 5 hour trip. My family in Venezuela learned of the accident and I calmly spoke to them on the phone as they did not believe that I was alive, I was the most affected in the accident. I spoke to them calmly and that gave them calm and security of my state.
After making my admission, they took me to have a CT scan to see if I had no skull fracture, everything went well. The doctor arranged the operation for the next day, my first operation in the operating room, but incredibly I was not afraid. I had heard it said that medicine in Colombia was very good and I verified it.
The attention was very good, a nurse helped me bathe and gave me shampoo to wash my wound and was there the whole time. Then they came to the cubicle to disinfect the wound well and that did hurt a little, but it was something they had to do and then close the wound in the operating room.
The day of the operation arrived, the fourth day that I spent at the La María Hospital, my first total anesthesia and my first intervention, I did not eat anything since 4 in the afternoon the day before, that is very important to keep in mind.
When I woke up from the anesthesia I was in another room, everything had gone well. The same day I was discharged. We left for Bogotá with great fear of having another accident, we did it on another bus line. We no longer trusted the other line. Receive monetary compensation from the company.
In this time that I have been in Colombia I have not seen any of those things that I had heard. They have treated me very well, so it is just a prejudice that many people do perhaps because something bad has happened to them. I am not saying that Colombia is perfect, but perhaps God has protected me all this time.
This is my entrance to REDFISH RALLY 500 FREEWRITE CHALLENGE, Week # 3 of June, 2020. with the promp: STRUGGLE OF LIFE, inspired by @shadowspub. I read her las post :
@shadowspub/racism-is-learned-behaviour-so-is-respect-for-diversity
Human beings make many prejudices about things and we must learn not to do them.
All photos are my property, edited with Pho.to.
Versión en Español:
Esta es mi entrada a REDFISH RALLY 500 FREEWRITE CHALLENGE, Semana # 3 de junio de 2020. con el mensaje: LUCHA DE VIDA, inspirado en @shadowspub. Leí su último post:
@shadowspub/racism-is-learned-behaviour-so-is-respect-for-diversity
Los seres humanos hacemos muchos prejuicios sobre las cosas y debemos aprender a no hacerlas.
La vida es una constante lucha, cada día trae su dificultad que debemos superar, pero ya son problemas que estamos acostumbrados a tener y sabemos qué hacer.
La lucha de la vida se hace más grande cuando surgen cosas imprevistas como un accidente, es algo que muchas veces no sabemos manejar y solo con no dejarnos llevar por el susto y el miedo podremos superar.
Prejuzgue al país por todo lo que escuchaba decir en Venezuela y películas que veía en la televisión sobre guerrilla y drogas, pero mi curiosidad y el deseo de salir de la situación que estaba pasando mi país por la dictadura me llevó a emosionarme a hacer un viaje y también porque fue lo que me tocó.
Sucedió en el año 2016, cuando mi hijo tenía que venir a Colombia para el nacimiento de su hijo, mi nieto. El carro que nos traería hasta la frontera nos recogió a las 6 de la mañana, eran 4 horas hasta el terminal de Maicao, el primer pueblo de Colombia en la frontera con Venezuela.
Al llegar a Maicao abordamos el autobus que nos llevaría hasta Bogotá, la capital de Colombia. Todo era bonito, distinto a mi país que ya estaba reseco por la falta de agus, aquí todo era verde, renaciente, grandes árboles, sembradíos, extensiones de tierras todas llenas de pasto.
Todo transcurria bien, llevábamos 8 horas de camino y ya había caído la noche. No me gusta dormir en los viajes pero hubo un momento que creo que cerré mis ojos. Cuando sentí que el autobus se movía de un lado a otro y me desperté, cuado miré hacia adelante vi que unas luces daban vueltas y fue cuando supe que tendríamos un accidente. Puse mi mano a la rodilla de mi hijo y le dije:¨es un accidente, mi Dios¨, luego de eso no supe más nada.
Me desperté escuchando que me decían: ¨mamá, mamá¨. Me cuenta mi hijo que me llamó durante un buen rato, hasta que vió que desperté. Me ayudó a ponerme de pié, quitó algunas sillas del camino y junto con otros hombres rompieron el vidrio delantero del autobus ya que había quedado acostado de lado de la puerta de salida.
Caminé de la mano de mi hijo, toda aturdida y me sentía como flotando, pero podía ver la cara de los otros pasajeros que se asombraban al verme, yo estaba toda ensangrentada y mi hijo tenía sangre en la cara por unas heridas leves que sufrió.
Enseguida llegó una ambulancia, muy eficiente, que nos llevó a 4 personas al centro asistencial cercano. Hizo varios viajes hasta traerlos a todos. Mi hijo se quedó sacando parte del equipaje de mano, mi cartera con documentos, mi teléfono y mi laptop. Nada se perdió. Primer punto bueno a favor de la gente de Colombia.
La compañía dispuso de otro autobús para quienes quisieran seguir el camino, después de ser atendidos en el hospital. Yo debía quedarme porque sería trasladada a Medellín ya que necesitaba de una intervención quirúrgica con un Cirujano Plástico, ya que sufrí un escalpelo, pérdida de una parte de cuero cabelludo
En la mañana temprano nos llevaron a mi hijo y a mi en una ambulancia hasta Medellín, son como 5 horas de viaje. Mi familia en Venezuela supo del accidente y yo muy tranquila les hablé por teléfono ya que no creían que estuviera viva, fuí la más afectada en el accidente. Les hablé con tranquilidad y eso les dio calma y seguridad de mi estado.
Luego de hacer mi admisión me llevaron a hacerme un TAC para saber si no tenía fractura en el cráneo, todo salió bien. El doctor dispuso la operación para el día siguiente, mi primera operación en quirófano, pero increíblemente no tenía miedo. Había escuchado decir que la medicina en Colombia era muy buena y así lo comprobé.
La atención fue muy buena, una enfermera me ayudó a bañarme y me dio shampoo para lavar mi herida y estuvo allí todo el tiempo. Luego llegaron al cubículo para desinfectar bien la herida y eso si me dolió un poco, pero era algo que tenían que hacer para luego cerrar la herida en el quirófano.
Llegó el día de la operación, el cuarto día que pasaba en el Hospital La María, mi primera anestesia total y mi primera intervención, no comí nada desde las 4 de la tarde del día anterior, eso es muy importante tenerlo en cuenta.
Al despertar de la anestesia estaba en otro cuarto, todo había salido bien. El mismo día me dieron de alta. Salimos hacia Bogotá con mucho miedo a sufrir otro accidente, lo hicimos en otra línea de autobuses. Ya no confiabamos en la otra línea. Recibinos indemnización monetaria por parte de la empresa.
En este tiempo que llevo en Colombia no he visto nada de esas cosas que había escuchado. Me han tratado muy bien, así que es solo un prejuicio que muchas personas hacen quizás porque les ha pasado algo malo. No digo que Colombia sea perfecta, pero quizás me ha amparado Dios todo este tiempo.
I am a proud rallier of the #redfishrally form the @theterminal Discord.
