El 19 de julio de éste 2025, fue uno de esos dias que a pesar de saber que llegaría el final en algún momento, no estábamos al tanto de que esa situación había empeorado, al punto de no podernos despedir de mi papá mientras vivía. Ya han pasado unos días de aquel momento, sin poder hablar, comentar, expresar o compartir tantos sentimientos encontrados, pero que hace falta gestionar para el bienestar emocional personal.

Mi papá estuvo ausente en nuestra crianza, sin embargo se hizo presente de manera intermitente hasta mis 12 años de edad, cumpleaños, viajes cortos, hacia lo que podia para construir recuerdos, siempre lo ví de esa manera. Él era un hombre sin estudios a nivel académico, aún así, inteligente o más bien diría que una persona culta con gran amor por la lectura.

Su muerte fue una sorpresa para nosotros, los que estamos de éste lado. Mi papá fue el padre de dos familias, para una era el hombre ideal, para la otra solo fue el portador de muchos rasgos que ahora vemos en nosotros de adultos.

Tengo que reconocer que duele, que hubiese querido tenerlo así, como lo tuvo su otra familia, sin ser egoísta. Que aunque no fue parte de mis días, siempre tendrá un lugar en mi corazón ❤️, quedará también en los recuerdos de las pocas fotos que conservo de él.

Debo aceptar que fue parte de mi vida, que a pesar de la distancia, más las circunstancias en las que crecimos siempre sentí la necesidad de tenerlo cerca, pero estaba lejos de ser así.

Sé que mi papá sintió mucha culpa por su forma de actuar con nosotros, aunque quizás solo lo sepa el cura de la iglesia o lo guardó en su corazón, no lo culpo, el amor es un sentimiento que fluye sin importar las consecuencias, eso le paso a mis padres.

Siempre sentí la necesidad de culparlos por tantos errores, pero con la madurez entendí que el corazón fue su guía en ese momento y que fuimos el fruto de ese sentimiento, al final nos tocó crecer sin él, sin mi padre.

Siento una profunda tristeza que la guardo solo en mi corazón, siento rabia por no tener esa cercanía que hubiese querido con él, por no estar presente en mis actividades escolares, cuando aprendí a caminar, cuando mi hermano dejó ésta vida, incluso cuando nació mi hija, pero no lo culpo, no era parte de ésta familia porque las circunstancias no lo hicieron posible.

Recuerdo que mi papá siempre fue un hombre con carácter, pero tan dulce con nosotros en la poca memoria que tengo de él que me hubiese encantado disfrutar de su compañía, compartir aficiones como la lectura. La ausencia no desaparece las emociones, esas que me recuerdan cuánto añoré tener a mi padre presente, no solo lloré por su partida de éste mundo, sino por lo que no vivimos juntos.

Tengo derecho a extrañar, a sentir tristeza, a llorar o guardar para mi el dolor por su ausencia, por lo que no vivimos, no puedo hacer como si cualquier persona murió, a pesar de que no estuvo conmigo, no podría ser insensible como quizás los demás esperan de mí.

Se que mi padre vivió con la culpa hasta sus últimos días, con lo que pudo hacer, con la forma como manejo las cosas con nosotros. Cuando cumplí 22 años investigué dónde vivía, llegué a su casa 🏡 sin avisar, para verlo, conocer a mis tres hermanos, eso fue un poco duro para él, casi le causó un infarto, Jejeje, en ese momento supe que durante todo ese tiempo se guardo nuestra existencia, se revelaron tantos secretos con mi presencia, aunque ahora que lo pienso lo que hice fue liberarlo de tanta presión en su corazón por ocultar una relación de (5) hijos. Después volví en dos oportunidades, no era lo mismo, parece que nos había pasado el tiempo, se notaba.

Todas estás líneas las escribo, porque es tiempo de expresar cuántas emociones he sentido durante estos días de duelo, de reconocer que no está mal extrañarlo a pesar de todo, que me vienen momentos de tristeza cuando recuerdo lo que no vivimos, cuando reconozco que lo quiero aún después de su partida, que siempre tendrá un lugar especial en mi corazón ❤️. La distancia, o la ausencia nunca me llevaron a odiarlo o guardarle rencor. Solo espero que antes de su muerte se sintiera capaz de perdonar sus errores, porque nadie tiene porque juzgar. Drenar o dejar fluir tantas emociones juntas han sido una terapia para mí, entre tantas alegrías vividas en estos días y enfrentar el dolor por la muerte de mi papá al mismo tiempo, necesitaba un equilibrio para no llenarme de culpa. Ésta es mi despedida por su partida física, más guardo sus recuerdos en mi corazón ❤️.

July 19, 2025, was one of those days that despite knowing that the end would come at some point, we were not aware that the situation had worsened, to the point of not being able to say goodbye to my father while he was alive. A few days have passed since that moment, without being able to speak, comment, express, or share so many conflicting feelings, but that needs to be managed for personal emotional well-being.

My dad was absent from our upbringing, however, he was present intermittently until I was 12 years old. He spent birthdays, short trips, doing whatever he could to make memories. I always saw him that way. He was a man with no academic education, yet he was intelligent, or rather, I would say a cultured person with a great love of reading.

His death was a surprise to us, those of us on this side. My father was the father of two families; for one, he was the ideal man; for the other, he was simply the bearer of many traits we now see in ourselves as adults.

I have to admit it hurts. I would have liked to have him like this, like his other family had him, without being selfish. That even though he wasn't part of my days, he will always have a place in my heart ❤️, he will also remain in the memories of the few photos I keep of him.

I must accept that he was part of my life, that despite the distance, plus the circumstances in which we grew up, I always felt the need to have him close, but he was far from being So.

I know my dad felt very guilty about the way he acted towards us, although perhaps only the priest at church knows or he kept it in his heart. I don't blame him. Love is a feeling that flows regardless of the consequences. That's what happened to my parents.

I always felt the need to blame them for so many mistakes, but with maturity, I understood that their heart was their guide at that moment and that we were the fruit of that feeling. In the end, we had to grow up without him, without me. father.

I feel a deep sadness that I keep only in my heart. I feel anger for not having the closeness I would have liked with him, for not being present at my school activities, when I learned to walk, when my brother left this life, even when my daughter was born. But I don't blame him. He wasn't part of this family because circumstances didn't make it possible.

I remember that my dad was always a man of character, but so sweet to us in the little memory I have of him that I would have loved to enjoy His company, sharing hobbies like reading. Absence doesn't erase emotions, those that remind me how much I missed having my father present. I cried not only for his departure from this world, but for what we didn't experience together.

I have the right to miss him, to feel sad, to cry, or to keep the pain of his absence to myself, for what we didn't experience. I can't pretend that anyone died, even though they weren't with me. I couldn't be insensitive, as others might expect of me.

I know my father lived with guilt until his last days, with what he could have done, with the way he handled things with us. When I turned 22, I investigated where he lived. I arrived at his house 🏡 without warning to see him and meet my three brothers. That was a little hard for him. It almost gave him a heart attack. Hehe. At that moment, I knew that during all that time, he had kept our existence to himself. So many secrets were revealed with my presence. Although now that I think about it, what I did was free him from so much pressure on his heart for hiding a relationship with (5) children. Afterwards, I returned twice; it wasn't the same. We had spent time together.

I write all these lines because it's time to express how many emotions I've felt during these days of mourning, to recognize that it's not wrong to miss him despite everything, that moments of sadness come to me when I remember what we didn't experience, when I recognize that I love him even after his departure, that he will always have a special place in my heart ❤️. Distance or absence never led me to hate him or hold a grudge. I only hope that before his death he felt capable of forgiving his mistakes, because no one has the right to judge. Draining or letting so many emotions flow together has been therapy for me. Between so many joys experienced these days and facing the pain of my dad's death at the same time, I needed a balance so as not to be filled with guilt. This is my farewell for his physical departure, but I keep his memories in my heart ❤️.