Somos responsable de todo lo que pasa en nuestra vida | We are responsible for everything that happens in our life

¿Realmente soy responsable de mis decisiones?

Lo que ves en la foto, son semillas de ixoras. Una flor muy común en las plazas de Venezuela, sobre todo en Anzoátegui, donde de acuerdo al clima se adaptan muy bien.

Cuando son de color negro ya están listas para la siembra. Pero antes de ello son un capullo, luego una flor, después una semilla verde que empieza a tomar un color naranja, luego rojo, y finalmente negro.

Es allí cuando llega a la madurez.

Así como las ixoras, los humanos también maduramos.

Sobre ello, mi abuela solía decir que el ser humano nace, crece, se reproduce y muere.

Vamos cumpliendo nuestro ciclo, y a medida que eso pasa, vamos aprendiendo. Así que en todo este proceso tomamos decisiones.

En las cuales somos responsables.

Por supuesto, es una opinión que causa muchísima incomodidad cuando se trata de familia, dinero, salud o amor. Debido a que, como seres humanos, nos cuesta reconocer nuestros propios errores, aunque no todos son errores, también hay otros a los que podemos llamar situaciones.

Solemos escuchar frases como "el que es pobre es porque quiere", o "el que se busca su mal por sí solo, que vaya al infierno a quejarse".

Para ese entonces no lo entendía. Era demasiado joven.

Hasta que entré a la adultez, comprendí muchas cosas.

Efectivamente, el que es pobre es porque quiere, y el que se busca su mal por sí solo tiene que trabajar para solventarlo.

Suena mal, cae mal, incluso a mí me cayó mal. Pero, es la realidad, con algunas excepciones. Hay personas que lastimosamente viven en situaciones muy duras, como los niños en África, o, siguiendo un ejemplo más cercano, los niños en mi país, Venezuela. Con ello me refiero a aquellos que son producto de la irresponsabilidad, esos chicos que el destino les da con todo, teniendo que vivir de la caridad y en las calles.

En este caso no podemos responsabilizarlos, no es su culpa. No fue su decisión. Sin embargo, sí es la decisión de alguien más.

Se suele decir que los hijos son una bendición y que "nacen con un pan debajo del brazo". ¡Qué mal le han hecho estos dichos a nuestra sociedad!

Efectivamente, todo niño es una bendición. Pero, también debería considerarse un crimen que alguien haga sufrir a un niño.

Las personas creen fielmente en ello, el problema es que hoy en día es más común ser irresponsables y dejar a niños inocentes a su suerte.

Fueron dos personas que tomaron una decisión. Una decisión que le hizo daño a chicos que ahora luchan por sobrevivir, sin derechos ni hogar.

Claramente, es un hecho que posee una dependencia mayor; la educación sexual, es uno de ellos. Pero, yo le añado la falta de conciencia.

Debido a que este siempre ha sido uno de mis mayores temores, tener hijos y no poderles dar lo que necesitan solo porque yo no lo tengo. Así que desde esa conciencia he tomado la responsabilidad de no tener hijos hasta que pueda tener las condiciones apropiadas para brindarles lo que necesitan.

Ante ello me han preguntado que si nunca llego a ello, será muy tarde. Pero, honestamente, prefiero nunca tener hijos a que sufran porque un adulto no fue capaz de lograrlo y de ser responsable.

Además de que no soportaría eso.

De igual forma podemos pensar en la salud. Decimos que el mal de todo es el azúcar, los alimentos procesados, esto, el otro y aquello. Pero, hay que ser sinceros, es nuestra culpa.

Es nuestra culpa cuando comemos de forma irresponsable cantidades exageradas de azúcar, y otros productos que sabemos muy bien que nos hacen daño. Solo con la escusa "igual te vas a morir".

También tengo que mencionar la mala manía que tienen las personas de juzgarte con el dedo cuando decides cuidarte. Si están mal, quieren verte igual. Es tan simple como ello. Por esto ante este tipo de comentarios lo mejor es ignorarlos.

Curiosamente, como sociedad tenemos dichos para justificar nuestras malas acciones.

Incluso, me declaro culpable en ello. Porque en esto también debemos aprender a escuchar nuestro cuerpo.

Sufro de migrañas, por un motivo específico. Si me excedo en el uso de la computadora, las migrañas me pueden romper la cabeza en dos del dolor.

Sí me estreso demasiado, igualmente.

Así que, teniendo este conocimiento, debo de cuidarme. Me acuesto temprano, limito el uso de los aparatos que sé que me hacen daño, y regulo el estrés haciendo actividades que me relajen.

Es por ello que suelo hacer énfasis en ello en mi blog.

Soy consciente de mi cuerpo, y con base en ello me cuido. Hay que escucharnos, conocernos. Así como sabemos cómo subir fotos a Instagram, editar imágenes o cualquier cosa. También debemos dedicar tiempo a nosotros para poder saber lo que nuestro cuerpo necesita.

Igualmente con el amor. Nos quejamos, y nos quejamos.

Yo también lo he hecho, me queje en innumerables ocasiones de que los hombres en mi vida eran malos. De que la pareja con la que estaba no me trataba bien. Pero, ¿qué hacía yo? Seguía con una persona que sabía que no me hacía bien. O, le daba paso a personas que sabía que no eran las correctas.

La realidad es que el ser humano adulto tiene la capacidad de distinguir entre lo bueno y lo malo. Pero, tenemos tendencia a elegir lo malo debido a nuestra debilidad.

Un ejemplo curioso, y al mismo tiempo la respuesta que tanto busque a un tema alarmante, que obtuve el día de ayer.

Me preguntaba a qué se debía que las mujeres estaban relacionándose con delincuentes.

Esto debido al número de noticias que hay en línea, donde lastimosamente algunas no pueden contar la historia porque mueren a manos de estos. También los innumerables casos de maltratos.

Entonces, ¿por qué una mujer estaría con alguien que sabe que hace las cosas mal? ¿Con alguien que sabe que tiene un historial cuestionable y que ella puede ser la siguiente?

Así que mientras veía los estados de WhatsApp, miré el estado de una amiga donde decía que si ves un hombre así "te hará todo lo que dijo por mensaje".

Nuestra sociedad está tan vacía que hay personas que solo limitan su pensamiento a cosas que, aunque pueden definirse como una necesidad, es una total tontería.

Una persona es capaz de recibir maltratos, o de terminar en una tumba solo por un momento, o, varios.

Es absurdo.

Pero, esas son nuestras decisiones. Decisiones malas que nos llevan a situaciones sumamente difíciles.

Nos falta conciencia. Y muchísima sensatez.

Sé que también es un problema en cuanto a la educación, que no todos tenemos el beneficio de tener una educación que nos lleve a la conciencia. Por ende, también a la madurez. Es por ello que también decidí atreverme a escribir este texto de una forma cruda.

Porque creo que en la actualidad las tonterías nos están consumiendo. En Internet solemos ver barbaridades sin sentido que solo apoyan cosas que no están bien, tales como la promiscuidad. Esto sin contar las canciones más famosas.

Todo esto te envuelve, escuchas tonterías en forma de "música" cuando vas camino a casa debido a que es la música del bus, o está en una tienda por la que pasas.

Lo que me hace pensar en que esto lo ven los chicos, un mundo podrido. Donde estamos nosotros como adultos o padres, aunque no tengo hijos, me alegro de poder tener esta madurez en la actualidad para guiarlos en un futuro.

Porque la industria no parará de crear porquería. Solo se justificarán con que los padres deben educar a sus hijos. Tienen razón, pero, le añado que hay que educar para dejar de darle poder a lo que está mal.

Por ende, eso es lo que falta en nuestro mundo: guía, dirección. Dirección en medio del caos que solo amenaza con destruir. Un caos que solo desea dinero a costa de la vida, la estabilidad mental y emocional, la familia, y la juventud.

Pero, ante ello, hay que tener una conciencia más amplia. Y es que todo esto también ha sido creado y permitido.

La sociedad no es un desastre solo porque las generaciones actuales lo son. Hay una raíz, y hay que llegar a ello.

Es por ello que las decisiones que tomamos, no solo afectan bárbaramente nuestra vida, sino también la sociedad en la que vivimos.

Incluso, como creadores de contenido. Alguien lee, alguien ve nuestras fotografías y videos. ¿Qué aportamos a nuestra sociedad? ¿Qué somos? ¿Qué decidimos hoy?

Son tan solo algunas preguntas que me hago antes de publicar cualquier cosa en Internet. A veces hay ocasiones donde me equivoco por mi propia humanidad, luego rectifico y elimino lo que publico, porque sé que no aporta nada.

Esto a veces me pasa en Twitter (X). Sin embargo, aunque sé que lo que te he dicho suena a regaño fatídico, ante todo esto está una solución.

Y es que siempre podemos rectificar y hacer las cosas mejor.

En la vida nos equivocaremos, por esas decisiones que tomamos. Pero, al ser conscientes de ello, podemos cambiar y hacer las cosas mejor.

Un excelente ejemplo son las personas que, aunque no planearon tener hijos, salieron adelante con ellos. Y hacen todo lo posible día a día para darles lo mejor: una buena educación, padres presentes y calidad de vida.

O aquellos que, aunque saben que vivieron una vida de desastres, ahora deciden llevar una más saludable, acostándose temprano, consumiendo comida sana, y haciendo ejercicio.

Sé que te regañe mucho, y lo siento. Pero, quería que vieras todo. Y también que hay maneras de construir en medio de una demolición.

Porque somos humanos, nos equivocaremos; sin embargo, poseemos la capacidad de construir. Y si no me crees, ve a tu alrededor todo lo que hemos hecho. Si no fuese por esa capacidad, aún seríamos cavernícolas en cuevas. Y no estamos así, afortunadamente.

Lo que nos dice que como sociedad sí podemos tener un avance real.