Saludos a toda la comunidad de Hive
Esta semana en que se celebra la Semana Santa, generalmente la dedico a descansar y relajarme, a visitar a mi familia hermosa, ir a las actividades de la Iglesia, pasear, en fin a hacer actividades diferentes a la rutina del trabajo. Sin embargo, este año ha sido diferente, me ha tocado trabajar de lunes a miércoles, en la Isla de Margarita, en el Estado Nueva Esparta.
A pesar de que el horario de trabajo es bastante fuerte, siempre hay tiempitos para disfrutar de estos paisajes espectaculares.
Hoy fue uno de esos dias. Luego del almuerzo, teníamos media hora libre. Asi que, en los carros que había disponibles, se hizo un recorrido por los espacios de Playa Guacuco
Desde este punto se puede observar Las Islas que pertenecen al Archipiélago de Los Frailes, miren esta belleza en el horizonte:
La visita a la playa fue una experiencia revitalizante y profundamente serena.
Al llegar, fui recibida por la suave caricia de la brisa marina mientras el sol bañaba el paisaje con su cálida luz.
El murmullo constante de las olas rompiendo contra la orilla sirvió como una melodía natural que acompañaba nuestro recorrido.
Estas olas que llegan a la orilla susurran melodias de paz y relax.
Nos detuvimos en varios paradores que hay en el camino para contemplar el mar y ese juego de colores tan lindo que nos regala.
En una de esas paradas, muy cerca del mar, cerré los ojos, y una sensación de tranquilidad profunda se instaló en mi, como si el mundo se hubiese detenido solo para regalarme ese instante de paz.
La vista del horizonte sin fin y el suave susurro del viento se combinaron para crear un cuadro de luz y color impresionante, donde el tiempo pareció diluirse lentamente, dejándome con una sensación renovada de calma y gratitud.
La playa no solo fue un lugar físico hoy, sino un espacio de bienestar y conexión con la naturaleza que me permitió recargar energías y encontrar un equilibrio tan necesario.
Tanta quietud y paz sentí que me había olvidado de la hora, y cuando vi, ya se había pasado la media hora. Tuvimos que correr para llegar a tiempo a la actividad de la tarde. Pero valió la pena... de verdad necesitaba recargar las energías, y entre el sol, el mar, la brisa y toda esa belleza integrada en esos paisajes me sentí plena, feliz y llena de energía.
Todas las fotos fueron tomadas por mi con mi Redmi 14C
Traducción realizada con DeepL.
English Version (Click aquí)
Greetings to the Hive community
This week, when Holy Week is celebrated, I usually dedicate it to rest and relax, to visit my beautiful family, to go to church activities, to go for a walk, in short, to do activities different from my work routine. However, this year has been different, I have had to work from Monday to Wednesday, in Margarita Island, in the State of Nueva Esparta.
Even though the work schedule is quite heavy, there is always time to enjoy these spectacular places.
Today was one of those days. After lunch, we had half an hour free. So, in the cars that were available, we made a tour of the spaces of Playa Guacuco.
From this point you can see the islands that belong to the Archipelago of Los Frailes, look at this beauty on the horizon:
The visit to the beach was a revitalizing and deeply serene experience.
Upon arrival, I was greeted by the gentle caress of the sea breeze as the sun bathed the landscape with its warm light.
The constant murmur of the waves crashing against the shore served as a natural melody that accompanied our tour.
These waves that reach the shore whisper melodies of peace and relaxation.
We stopped at several stops along the way to contemplate the sea and the beautiful play of colors it gives us.
In one of those stops, very close to the sea, I closed my eyes, and a feeling of deep tranquility settled in me, as if the world had stopped just to give me that moment of peace.
The view of the endless horizon and the soft whisper of the wind combined to create a breathtaking picture of light and color, where time seemed to slowly melt away, leaving me with a renewed sense of calm and gratitude.
The beach was not only a physical place today, but a space of well-being and connection with nature that allowed me to recharge energies and find a much needed balance.
So much stillness and peace I felt that I had forgotten the time, and when I saw, it was already past the half hour. We had to run to get to the afternoon activity on time. But it was worth it... I really needed to recharge my energies, and between the sun, the sea, the breeze and all that beauty integrated in those landscapes I felt full, happy and full of energy.
All photos were taken by me with my Redmi 14C phone
Translation done with DeepL.