El mundo empresarial es una zona amplia por donde se transita con diferentes tipos de personalidades, hacemos referencia a esto por la cantidad de estrategias y herramientas que se pueden utilizar para llevar una vida financiera sana; cuando una empresa comienza hacer un balance financiero, descubre cada uno de los puntos importantes para soportar las presiones de los años comerciales y por supuesto conocer la cantidad de ganancias que entrara a sus arcas. Ahora bien, las empresas siempre tienen un dilema y es ¿Cuánto es el porcentaje correcto de ganancia? Pues todas buscan un equilibrio económico que no coloque en riesgo su funcionamiento, pero que la compañía mantenga una posición competitiva.
Las ganancias de una empresa dependerán del mercado comercial donde se desarrolle la misma, ya que a partir de esto se conocerá los precios a tomar en cuenta, para ofrecer el producto final y que este sea atractivo para cualquier consumidor.
El porcentaje de beneficio, va en conjunto con los componentes que se emplean para producir un volumen equis de productos, conociendo en su totalidad cada gasto que la empresa tenga en el proceso, para que una empresa obtenga un balance positivo tiene que comenzar a equilibrar los gastos en materia prima con la mano de obra empleada.
Si la compañía se encuentra inmersa en un mercado comercial con un volumen de transacciones bajas, debe tener claro que para mover mayor cantidad de producto y tener un retorno de capital rápido, debe ofrecer precios atractivos para los usuarios.
Como sugerencia para las ganancias de una empresa pequeña, se debe conocer todos los factores que influyen en el costo de producción y multiplicar dos veces el valor final, si tu producto no puede salir al mercado con esta ganancia sugerida, debes encontrar la forma de equilibrar el costo de producción, hasta que llegues a esta ganancia; para que una empresa mantenga un crecimiento lineal, debe adoptar un plan de comercio que le permita fluir y no tenga ningún tipo de competencia o al menos que sus precios sean más atractivos que otros.
Existen muchas compañías nacientes que generan ganancias por debajo de lo sugerido y su continuidad en el mercado se ve comprometida, simplemente porque aquellas que si mantienen unas ganancias acorde a su costo de producción, pueden comprar mayor cantidad de materia prima, contratar una mano de obra y equipos más especializados, logrando de esta forma controlar el mercado donde están establecidas; esta siempre será la gran diferencia entre ser una empresa rentable y ser una empresa naciente.