Este fin de año mi familia se volvió a reunir para festejar la navidad y si, se que en esta pandemia dye debían tomar mas precauciones, pero son decisiones que no puedo tomar yo (a pesar de mis 29 años) y me tuve que reunir.
Yo nunca me he sentido conectado con mi familia y de hecho al reunirme con mis tíos y tías siempre me quedo callado, solo escuchando o incluso prender mi computadora y ponerme a jugar. Y en casos como en la navidad, me pongo a comer todo lo que se ha hecho durante para la cena hasta que mi cuerpo no puede más y está no es la excepción, creo que termine indigesto.
Para está Navidad, viaje en auto hasta casa de mi tía en Ecatepec, Estado de México y una vez ahí hice lo mismo de siempre, sin embargo está vez me la pase platicando con mis primos, sobre todo con uno que jamás nos hemos caído bien, y tal vez porque ya somos adultos y hemos madurado es porque por fin podemos tener una charla amena y agradable.
Mi madre fanática de las fotografías estuvo feliz sacando fotografías con toda la familia y en general ellos se la pasaron muy bien, disfrutaron de su convivencia y yo disfruté de comer costillas y alitas hasta reventar
Tal vez no me lleve bien con mi familia, pero de alguna forma disfrute verlos felices y platicando sin parar, por horas y horas libres de preocupación, una bonita forma de pasar el fin de año, solo espero que está reunión no traiga consecuencias de las que uno se pueda arrepentir