“A veces no se sabe a dónde se llega, hasta que tropiezas, caes, continuas, te vuelves a caer y sigues, pero en otra ruta tras un aprendizaje”

En la vida nada es lineal, matices, desvíos y un sinfín de momento convierten a este viaje en una ruta con destino, a lo que muchos queremos etiquetar pero pocos llegamos a comprender.

Estoy culminando mi 4to semestre de Comunicación Social, basta decir que ha sido un poco cuesta arriba, me he estado enfrentado al enemigo más formidable que he tenido, uno que para vencer me esta llevando una dosis abrupta de realidad, y una comprensión de que el amor conlleva sacrificios que incluso van en contra de creencias.

Ese enemigo me ha enseñado que debo pedir ayuda, y ahorgarme no es opción cuando se ha perdido una parte de mi, lo cierto es que unos le llaman la mente, otros torbellinos y en mi caso es el cúmulo de pensamientos, que me recuerdan lo mucho que debo cuidar de mi misma.

Recuperar mi luz no ha sido sencillo y admito que a veces no me siento conforme, como si algo me estuviera evaluando y yo supiera que voy a reprobar, luego pienso en lo transitorio de ese sentimiento y en como tras ser una escritora, la fantasia se puede confundir con la realidad, admito que desecho esos pensamientos, pero siguen estando allí y en eso trabajo.

Pues lo que se ignora no desaparece, al contrario, se esconde siempre retorna con fuerza. El reconocimiento de un sentimiento o pensamiento nocivo permite lidiar con el e incluso disminuir su impacto, supongo que ahora entiendo que todo es importante, y comprender todo aquello permite establecer una ruta concreta.

Mi ruta es sencilla y culmina en el momento en que el que se cierra un capítulo de mi vida, donde solo me veo descansando en una rutina que me llena de paz, pero el futuro aunque repentino, tiene montones de cosas por las que puede desbalancearse, asi que me preocupo por la ruta de ahora.

Mi ruta ahora se trata en fortalece aún más toda aquella luz que me nutre, porque soy más que el físico, mis derrotas o mis triunfos, soy un ser inigualable que sueña en grande, construye desde lo más pequeño pero logra todo desde las ganas de vivir a plenitud.

Si tuviera que describir mi ruta estoy seguro que más de uno no entendería, en su mayoría dirían que estoy loca o algo peor, pero lo cierto es que no pienso abandonarla, porque aun en modificaciones sigue siendo las metas que llenarán de luz toda vida.

Mi ruta es subjetiva para quien la mire y maravillosa para quien la experimenta, pues desde lo mas sagrado reconozco que está llena de la mirada profunda de una mujer, que ansía saborear lo hermoso de la paz y tranquilidad.

No se a donde me lleve la vida y si esta ruta tendrá uno que otro desvio, pero lo cierto es que el agradecimiento hacia lo que he obtenido perdurará para toda la vida.

“Sometimes you don't know where you're going until you stumble, fall, keep going, fall again, and keep going, but on a different path after learning something.”

In life, nothing is linear. Nuances, detours, and endless moments turn this journey into a route with a destination, which many of us want to label but few of us ever understand.

I am finishing my fourth semester of Social Communication. Suffice it to say that it has been a bit of an uphill battle. I have been facing the most formidable enemy I have ever had, one that, in order to defeat, is giving me an abrupt dose of reality and an understanding that love entails sacrifices that even go against beliefs.

That enemy has taught me that I must ask for help, and that drowning myself is not an option when I have lost a part of myself. The truth is that some call it the mind, others call it whirlwinds, and in my case, it is the accumulation of thoughts that remind me how much I must take care of myself.

Regaining my light has not been easy, and I admit that sometimes I feel uncomfortable, as if something were evaluating me and I knew I was going to fail. Then I think about how fleeting that feeling is and how, as a writer, fantasy can be confused with reality. I admit that I dismiss those thoughts, but they are still there, and I am working on that.

Because what is ignored does not disappear; on the contrary, it hides and always returns with force. Recognizing a harmful feeling or thought allows you to deal with it and even lessen its impact. I suppose I now understand that everything is important, and understanding everything allows you to establish a concrete path.

My path is simple and culminates at the moment when a chapter of my life closes, where I only see myself resting in a routine that fills me with peace. But the future, although sudden, has many things that can throw it off balance, so I worry about the path I am on now.

My path now is about further strengthening all the light that nourishes me, because I am more than my physical self, my defeats, or my triumphs. I am a unique being who dreams big, builds from the smallest things, but achieves everything from the desire to live life to the fullest.

If I had to describe my path, I am sure that more than one person would not understand. Most would say that I am crazy or something worse, but the truth is that I do not intend to abandon it, because even with modifications, it is still the goals that will fill my whole life with light.

My path is subjective to those who look at it and wonderful to those who experience it, because from the most sacred part of myself, I recognize that it is filled with the deep gaze of a woman who longs to savor the beauty of peace and tranquility.