Como hablar de paciencia en un mundo que nos ha acostumbrado a lo acelerado, a lo inmediato y a la satisfacción rápida. Podría decir que bajo este comportamiento tan normal en el que nos movemos, la paciencia se convierte en un pequeño y diminuto arte invisible, en un susurro tan suave que parece desapercibido, pero que se mueve en medio de un gran estruendo mundial.
Te puedo asegurar que, con estas palabras, la paciencia tiende a percibirse como lejana y como inalcanzable, como esa estrella en medio del firmamento, pero déjame decirte que la realidad es diferente, ya que la paciencia vive en nuestro interior, en lo más profundo de nosotros, esperando ser descubierta, pero sobre todo ser protegida.
Esto me permite inferir, que la paciencia se cultiva, así como se cultiva un jardín, necesitamos dedicarle constancia, y, sobre todo, amor, debemos verla como un rio de agua viva que fluye a diario, donde habrá días en los que el agua corre de forma tranquila y cristalina, y otros en los que las corrientes parecen querer arrastrarnos.
Y es en ese punto, donde la paciencia emerge como una piedra firme en el lecho del río, esa que resiste el paso del agua, que no se deja llevar por la prisa ni por la fuerza de la corriente. Esa que nos permite observar, aprender y crecer, incluso cuando todo a nuestro alrededor parece obligarnos a correr.
Aunque tenemos que hacernos consiente, que no es fácil encontrar esa roca, no siempre es fácil verla, pero su luz está ahí, guiándonos, recordándonos que cada tormenta pasa, y que cada noche tiene un amanecer.
Aunque en muchas ocasiones, sentimos que el tiempo es nuestro mayor enemigo, hoy te invito, hacer una pausa a respirar hondo y ha aprender a observar es vez de simplemente mirar, en ese momento notaremos y descubriremos que la paciencia es un puente que nos conecta con nosotros mismos, con nuestras emociones y con los demás, representa esa pausa antes de la palabra, es ese silencio antes de la respuesta, es el espacio que le damos al otro para ser, para equivocarse, pero sobre todo para crecer.
Con estas palabras no quiero decir que la paciencia sea resignación, no apuesto por el quedarte quieto sin hacer nada, por el contrario, debes aprender a moverte eso es una forma de sabiduría, una manera de confiar en los tiempos de la vida, en los ciclos que nos enseñan que todo llega cuando debe llegar.
Que no es fácil, de eso puedes estar seguro, ya que te encontraras con días en los que querrás dejar todo tirado, lanzar la toalla como solemos decir, son esos días en los que sentimos que no podemos esperar ni un minuto más, pero te aseguro que, si perseveras, si te das permiso para sentir y para aprender, descubrirás que la paciencia te regala una paz profunda, una serenidad que nada ni nadie puede arrebatarte.
Recuerda que hay cosas que no puedes controlar, y el ser paciente en los tiempos, nos enseña a ver la belleza en lo pequeño, a disfrutar del proceso y no solo del resultado. Observa al artesano que talla la madera, que sabe que cada golpe de cincel, por pequeño que sea, es necesario para crear algo hermoso. O como el jardinero que espera la floración, confiando en que la semilla, aunque invisible bajo la tierra, está trabajando en silencio para brotar.
Ahora te vuelvo a peguntar ¿La paciencia se busca o se cultiva? La repuesta está más que clara, ahora yo partiré de lo siguiente, considero que la paciencia se cultiva mientras se busca, es un camino, no un destino. Y en ese camino, aprendemos a ser más amables con nosotros mismos, a entender que cada error es una oportunidad, que cada espera tiene un sentido, aunque no lo veamos de inmediato.
Y tu ¿cómo percibes la paciencia? déjame tu opinión en los comentarios o anímate a escribir al respecto. Bendiciones.
ENGLISH VERSION
How to talk about patience in a world that has accustomed us to the accelerated, to the immediate and to quick satisfaction. I could say that under this very normal behavior in which we move, patience becomes a small and tiny invisible art, a whisper so soft that it seems unnoticed, but that moves in the midst of a great global din.
I can assure you that, with these words, patience tends to be perceived as distant and unreachable, like that star in the middle of the sky, but let me tell you that the reality is different, since patience lives inside us, in the deepest part of us, waiting to be discovered, but above all to be protected.
This allows me to infer that patience is cultivated, just as a garden is cultivated, we need to dedicate constancy and, above all, love, we must see it as a river of living water that flows daily, where there will be days in which the water flows in a calm and crystalline way, and others in which the currents seem to want to drag us.
And it is at this point where patience emerges as a firm stone in the riverbed, that which resists the passage of water, which does not let itself be carried away by the rush or the force of the current. That which allows us to observe, learn and grow, even when everything around us seems to force us to run.
Although we have to be aware that it is not easy to find that rock, it is not always easy to see it, but its light is there, guiding us, reminding us that every storm passes, and that every night has a dawn.
Although on many occasions, we feel that time is our greatest enemy, today I invite you to pause, take a deep breath and learn to observe instead of just watching, at that moment we will notice and discover that patience is a bridge that connects us with ourselves, with our emotions and with others, it represents that pause before the word, it is that silence before the answer, it is the space we give to the other to be, to be wrong, but above all to grow.
With these words I do not mean that patience is resignation, I do not bet on staying still without doing anything, on the contrary, you must learn to move, that is a form of wisdom, a way to trust in the times of life, in the cycles that teach us that everything comes when it should come.
That it is not easy, of that you can be sure, since you will find days when you will want to throw in the towel as we usually say, are those days when we feel we can not wait a minute more, but I assure you that if you persevere, if you give yourself permission to feel and to learn, you will discover that patience gives you a deep peace, a serenity that nothing and no one can take away from you.
Remember that there are things you cannot control, and being patient with the times, teaches us to see the beauty in the small, to enjoy the process and not just the result. Observe the craftsman who carves wood, who knows that each stroke of the chisel, however small, is necessary to create something beautiful. Or like the gardener who waits for the bloom, trusting that the seed, though invisible beneath the soil, is silently working to sprout.
Now I ask you again, is patience sought or cultivated? The answer is more than clear, now I will start from the following, I believe that patience is cultivated while looking for it, it is a path, not a destination. And on that path, we learn to be kinder to ourselves, to understand that every mistake is an opportunity, that every wait has a meaning, even if we do not see it immediately.
And how do you perceive patience? Leave me your opinion in the comments or feel free to write about it. Blessings.
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