Somos un reflejo. No hablo en sentido metafórico sino en sentido literal. Al final lo que hacemos es porque lo aprendimos de alguien más. Nuestra formación empieza desde niño, y no me refiero a la formación educativa formal. Ya que esa empieza ya avanzada la edad, quizás a los 3 o a los 5 años, sino a esa educación que trasciende, porque es la que se mete en nuestra personalidad, en realidad des la que la conforma.
Cuando somos adultos tenemos conductas que a veces nos hacen parecer a nuestros padres, en realidad, son un reflejo exacto de lo que ellos son, y a veces nos molesta eso en nosotros mismos, porque terminamos, en gran medida y con mucha frecuencia, haciendo eso que nos molestaba de nuestros padres.
No digo que tengamos algo en contra de ellos, sino que al final somos humanos, somos seres que confluyen en este mundo, e independientemente de que haya un gran lazo de amor o cariño, tendremos diferencias, y habrá cosas que nos nos agraden del uno ni del otro, no creo que esto sea algo malo, somos humanos, repito.

Hay oportunidades en las que he podido notar que actúo de manera similar a la que ellos actuaban, me he visto realizando algunas actividades de manera muy parecida, incluso hay frases que digo, que no sonmías, sino son enteramente de ellos, y al caer en cuenta de esto, digo, "soy un reflejo" de ellos, de lo que he vivido, de mi mundo en general.
No digo con esto que no podamos cambiar, que no podamos mejorar algunas cosas, de hecho, creo que todos deberíamos mejorar sin ninguna excusa para hacerlo. Sé que los cambios son difíciles, sé bien que podemos oponer resistencias, pero no nos centremos en el "no poder" sino más bien en la necesidad de que las cosas ocurran para mejorar, es sencillo si lo asumimos como herramientas para mejorar.
