✨ Me alegra compartir estas palabras en la comunidad Gems, un espacio donde las emociones, la verdad y el alma tienen lugar. Gracias por recibir mi voz entre tantas joyas que inspiran, sanan y florecen. 💎🌿🌹🌹🌹
La vi desde lejos.
Sentada en medio de los restos.
Parecía una escultura rota.
No lloraba. No gritaba.
Solo recogía, con las manos desnudas,
las partes que el mundo le arrancó.
No era yo aún.
Era una versión anterior a mí.
Una mujer que creía que amar era resistir,
que sanar era reprimir,
que florecer era no molestar.
La observé.
Y no quise rescatarla.
Quise honrarla.
Me acerqué sin ruido.
Le hablé bajito,
como quien acaricia sin tocar:
"Gracias por sostener todo cuando no sabías soltar.
Gracias por fingir entereza mientras tu alma temblaba.
Gracias… por permitirte romperte sin pedir permiso."
No vine a reconstruirme desde la prisa.
Ni desde la exigencia.
Ni desde la imagen perfecta.
Hoy elijo las piezas que me honran.
Desecho las que me duelen.
No todo lo que se rompe merece volver a ser pegado.
He vuelto a mí
como quien vuelve al templo después de una guerra.
Y me construyo así:
Con manos suaves.
Con voz amable.
Con flores donde antes hubo espinas.
No me urge ser fuerte.
Me importa ser real.
Y si para eso debo desarmarme mil veces,
lo haré.
Porque merezco construirme con amor.
Y esta vez, desde mí.
💬 ¿Te has dado permiso de romperte sin culpa?
¿Y si hoy el acto más valiente fuera reconstruirte con ternura?
Te leo… como quien recoge flores en medio de los escombros. 🫶✨
🖋️ Texto de mi autoría
🎨 Imagen generada con inteligencia artificial para dar forma a lo que mi alma quería mostrar: una mujer reconstruyéndose desde la luz interna, no desde la exigencia externa.
— @florecemujer 🌹🌹