Los nietos son el oxígeno que nos mantiene con vida.
Mi nieta Melanie / Fuente @marcosmilano71
Mi nieto Matteo / Fuente @marcosmilano71
Una persona, tratando de perjudicar la buena reputación de mi madre, comenzó a decir que yo no era hijo de mi padre sino de mi abuelo, cuando mi abuelo Fermín se enteró, fue donde la persona y le dijo: “Tienes razón; ese niño es mío y como realmente es hijo de mi hijo, yo soy su padre dos veces”. A partir de ese momento la persona se retractó y más nunca se habló del tema.
One person, trying to damage my mother's good reputation, began to say that I was not my father's son but of my grandfather, when my grandfather Fermin found out, was where the person and said, "You are right; that child is mine and since he really is my son's son, I am his father twice." From that moment on, the person retracted and more never talked about it.
Mi querido y siempre recordado abuelo Fermín Hernández, hombre bueno, íntegro, decente, humilde, sencillo y sin ningún grado de escuela; supo con aplomo, respeto y con mucha sabiduría, poner en su sitio a la cizañera e intrigante mujer. Mi abuelo tenía razón, basta tener nietos para que el amor que ya se anida en nuestra alma, mente y corazón por los hijos, ahora se multiplica exponencialmente por los nietos y ese amor es tan excelso que trasciende del alma al espíritu para convertirse en algo místico, sublime e inmaculado.
My dear and always remembered grandfather Fermin Hernandez, good man, whole, decent, humble, simple and without any degree of school; knew with aplomb, respect and with great wisdom, to put in place the tares and intriguing woman. My grandfather was right, it is enough to have grandchildren so that the love that already nests in our soul, mind and heart for children, now is exponentially multiplied by the grandchildren and that love is so exalted that it transcends from the soul to the spirit to become something mystical, sublime and immaculate.
Mi sobrina nieta Amalia / Fuente @marcosmilano71
El poeta venezolano, Andrés Eloy Blanco escribió uno de los poemas mas hermosos que he leído, dedicado a los hijo y que tituló: Los hijos infinitos. "Cuando se tiene un hijo, se tienen tantos niños que la calle se llena". Basta tener hijos y amarlos profundamente para sentir que todos los hijos son también nuestros hijos, aprendemos a ser sensibles ante la humanidad entera.
The Venezuelan poet, Andrés Eloy Blanco, wrote one of the most beautiful poems I have ever read, dedicated to the sons and titled: The Infinite Sons. "When you have a child, you have so many children that the street fills up." It is enough to have children and to love them deeply to feel that all children are also our children, we learn to be sensitive to all humanity.
Mi sobrina nieta Carlota / Fuente @marcosmilano71
Lo que sentimos por los nietos es indescriptible porque, además de ser ellos "nuestros hijos dos veces" llegan cuando hemos madurado, cuando estamos cargados de experiencias y de sabiduría y en muchos casos, cuando estamos más tranquilos, cuando ya estamos jubilados. Esta condición nos pone en ventaja con los padres porque no tenemos el estrés del trabajo, del cumplimiento estricto de un horario, de las ocupaciones y preocupaciones constantes que genera la dinámica diaria en los jóvenes.
What we feel for the grandchildren is indescribable because, in addition to being them "our children twice" come when we have matured, when we are full of experience and wisdom and in many cases, when we are calmer, when we are already retired. This condition puts us in the way of parents because we do not have the stress of work, strict compliance with a schedule, constant occupations and concerns generated by the daily dynamics in young people.
Mi sobrina nieta Ana / Fuente @marcosmilano71
Los nietos son para los abuelos como el oxígeno que nos mantiene con vida, ellos dan vida a nuestros años porque son el amor inmarcesible que nos envía Dios, como recompensa por nuestro trabajo de padres y de ciudadanos ejemplares.
Grandchildren are for grandparents like the oxygen that keeps us alive, they give life to our years because they are the unmestible love that God sends us, as a reward for our work of parents and exemplary citizens.
Mi sobrina nieta Carlota / Fuente @marcosmilano71
Autor:@marcosmilano71
Los invito a visitar mi blog titulado: De los Principios y Valores que quedaron atrás.