Martiné is one of those cafés that tells you a story. You can tell everything was thoughtfully curated with love. We stayed about 15 minutes without ordering anything, just talking and soaking in the good energy of the place. We ordered cappuccinos — you already know that’s my favorite kind of coffee (the beans are local, of course) — and later a proper Colombian breakfast: arepita, scrambled eggs, and cheese. I also saw they had matcha, chai, plant-based milk lattes, vegan desserts… the menu is clearly designed for travelers and digital nomads looking for a blend of flavor, aesthetics, and good connection.
And speaking of connection — the WiFi works great (important detail if, like me, you’re in half-backpacker, half-work-from-anywhere mode). But beyond the internet, the true connection comes from the space itself. The music, the smells, and the warmth of the locals who welcome you with kindness.
One thing I loved is that Martiné doesn’t compete with the landscape — it complements it. It’s just as colorful as Guatapé. It’s the perfect place to sit and watch life go by, write a few notes, have unhurried conversations, or simply let time pass slowly while your coffee gets cold — yes, my coffee always gets cold because I drink it so slowly. I feel like it’s an experience to savor with all the senses and enough time to truly enjoy it.
My recommendation for visiting Martiné? Take it slow. Order something delicious from the menu, pick a little table on the terrace and observe. It’s in those simple moments that the magic of towns like this really shines — and if it’s with a coffee in hand in a paradise like Guatapé, nothing can go wrong ❤️
ESPAÑOL
Entre los balcones coloridos del pueblo Guatapé se encuentra Martiné Café. Una coffee shop que encontramos por casualidad, como suele pasar con las mejores cosas. Era un día perfecto para caminar, soleado y despejado, lleno de turistas sorprendidos por lo mágico del lugar y todo tipo de tiendas abiertas para recibirnos. Íbamos bordeando las callecitas del pueblo cuando, de pronto, apareció este lugarcito con paredes azules bordadas con flores, y una vibra que nos gritó "entren y quédense un rato".
Martiné es de esos cafés que también te cuentan una historia. Se nota que todo fue pensado con cariño. Nos quedamos unos 15 minutos sin pedir nada, solo conversando y absorbiendo lo positivo del ambiente. Pedimos unos cappuccinos, ya saben que es mi tipo de café preferido (el grano es local, por supuesto) y posteriormente un buen desayuno típico colombiano, arepita, huevos revueltos y queso. También vi que tenían matcha, chai, lattes con leches vegetales, postres veganos... el menú está muy alineado con los viajeros y los nómadas digitales que llegan buscando una mezcla entre sabor, estética y buena conexión.
Y hablando de conexión, el WiFi funciona muy bien (dato importante si estás como yo, en modo mitad mochilera, mitad work-from-anywhere). Pero más allá del internet, lo que más conecta es el lugar en sí. La música, los olores y la calidez de los lugareños que te atienden de maravilla.
Una cosa que me encantó fue que Martiné no compite con el paisaje, lo complementa. Está lleno de color como Guatapé. Es el lugar perfecto para sentarte a ver pasar la vida, escribir unas notas, conversar sin prisa o simplemente dejar que el tiempo se te pase lento mientras el café se enfría jaja siempre se me enfría el café porque me lo tomo muy lento, siento que es una experiencia que debo disfrutar con todos mis sentidos y con suficiente tiempo para hacerlo.
¿Mi recomendación para ir a Martiné? Ve con calma. Pide algo delicioso del menú, elige una mesita en la terraza y observa. Es en esos momentos simples donde más se siente la magia de los pueblos como este y si es con un café en mano en un paraíso como Guatapé, nada puede salir mal ❤️
- Translation: DeepL translate
- Diseño/Design: Por mí utilizando CANVA/By myself using CANVA
- Video/Photography: Por mí /By myself
- English is not my native language, I apologize for possible errors in the translation.
"Todo es creado dos veces, primero en la mente y luego en la realidad " Robin Sharma.
Documento las cosas que me apasionan, mis aventuras llenas de color por el mundo, la deliciosa comida que me saca una sonrisa y mis opiniones y experiencias sobre moda. Soy fashionista, foodie, tech lover y community builder. Me encanta crear cosas geniales con mis manos, hacer sonreír a quienes me rodean y darle un vistazo al futuro mientras le doy forma a mi presente a través de web3. Conoce mi marca de ropa phygital @Metamerch 🚀