"Autumn in my life"//A Picture is Worth a Thousand Words//[ENG-ESP]

Dicen que el otoño cambia el aspecto de la vida natural, del paisaje, de quien lo vive y disfruta a su manera. En el otoño, todos los que hemos podido vivirlo, esperamos, como dice el poeta, “la caída de las hojas” Mi experiencia en otoño, fue sorprendente… Nunca había presenciado esa transformación. Me impactó descubrir que todo cuanto había visto en las historias, cuentos y films, ¡Era cierto! Cuánta emoción sentí al apreciar cómo los árboles caducos, porque así los llaman, se desprenden de sus hojas y con eso, ahorran o reservan la energía para la espera del invierno, estación que oculta los rayos del sol, por lo cual la fotosíntesis no se realiza al haber escasez de luz. El otoño es para el humano, así, lo veo, como la preparación y adaptación del cuerpo para los helados embates del invierno. En otoño hay frío, llueve, y sobre todo en Buenos Aires, hace mucha brisa, lo cual permite a los árboles caducos, desprenderse de su follaje con mayor facilidad, y dejarlos desnudos a esperar los embates del invierno. En el otoño se comprometen los enamorados, bajo las noches claras de luna, y resulta ser una de las musas favoritas de los poetas. Esta etapa también es una tentación para los paisajistas y fotógrafos, la inspiración artística está a flor de piel. Asimismo, las plazas, los cafés y las bancas, se llenan de parejas de enamorados otoñales, para afianzar ese gran amor que el tiempo permitió fortalecer. El otoño, es mi favorito, pues me seduce, llena de romanticismo, provoca bailar, cantar, caminar, y escribir locuras.