PAN Y MANTEQUILLA
La combinación perfecta, y uno de los matrimonios mas ricos y populares del mundo; creo que es un amor inquebrantable, de esos que son para toda la vida, de esos que no se cansan, así es esta combinación que por siglos a tratado de satisfacer los paladares de muchos comensales, sin importar clase social, lugar o nación. Demostración de ello, son los recuerdos y anécdotas que tenemos al compartir una rica taza de café con una rebanada de pan con mantequilla con nuestros padres, abuelos, hermanos y amigos; momentos propicios para largas charlas, reír y compartir, como los que tienen el placer de degustar un croissant con mantequilla en algún lugar de parís o Italia, en una plaza con una grata compañía, admirando un hermoso atardecer en toscana o quizás, sentados en una cafetería a los pies de la Torre Eiffel. No importa el lugar, lo que importante es que nos sintamos complacidos de lo que hacemos o comemos, olvidándonos de todo lo que nos agobia y hasta de la dieta jajajajaja. Yo por ejemplo,
recuerdo que de niña era habitual para todos en casa merendar pan tostado con mantequilla y guarapo (café colado guayoyo y dulce), mis hermanos y yo esperábamos la hora de la merienda; nos sentábamos debajo de un árbol de pomalaca a esperar que mi madre preparara los panes e hiciera del guarapo, son hermosos momentos que permanecen y siguen vigentes en mi vida, con olor a mamá y el hogar que un día deje para formar el mío. Creo que no hay hogar donde una rebana de pan, bien sea sobao, campesino, canilla o dulce con mantequilla los haya reunido para disfrutar el encuentro con los amigos y familiares. Gracias a Freewriters por crear este espacio para compartir un poco de lo que guardamos en nuestra mente y corazón.
El dibujo de la imagen fue hecho con mucho amor para ustedes para la realización de este post y editado con canva. Nos vemos en otros cinco minutos.