Friends of @worldmapping, I fulfilled an old desire to know one of the cities in the south of western Cuba, Bejucal, belonging to what we call Habana Campo. This area is characterized by the reddish color of its soils. But when it is said Bejucal we immediately think of its folklore.
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Art is prolific in this area, I enjoyed the Bejucal Drums, bearers of a rumba tradition with African roots, rooted in this area of the country, declared National Heritage.
I took a tour of the city, there at the Bejucal Museum, I let myself be carried away by the grace of the verb and rich history that Roberto Chaviano Cabrera, Conservation Specialist, treasures.
His slow voice and enviable memory pointed out each date and name to me. "For me every brick, every tile, every corner has a story." Chaviano is a pure Bejucaleño That, his passion for the history of those parts, which included his family, caught my interest all morning. Bejucal boasted development in the production of tobacco, later sugar and after ending the sugar decline in the area, tobacco work once again gained strength but in manufacturing from the chinchales, medium-sized industries. premises until the establishment in the city of large and prestigious firms such as Henry Clay and Bock & Co., H. Hupmann or Partagás and others.
"Bejucal, welcoming city" is how they say on the covers of old publications of that distinguished and noble town, exhibited in the Museum. Named San Juan del Bejucal, an estate belonging to the Spanish Captain Juan Nuñez del Castillo, since 1713. May 9, 1714, is the date designated as the foundation for the first meeting of the Cabildo. Only six among Villas and Cities emerged from this stately form of foundation.
The structure of the city and its old buildings transport me to the 18th century. Original grid of 35 founding blocks, divided into two quadrants by a well-designed symbolic axis of the powers: Ecclesiastical, Stately and Political Therefore, as the original creation of an urban-architectural layout typical of the Neoclassical cities.
The colonial constructions of the Ss. 18th and 19th centuries of what the Historic Center now occupies... evolved in their styles, complementing themselves later with the eclecticism of modernity in the republican period. The church was founded in April 1722, built with ashlar walls and covered with wooden coffered ceiling and tiles. On my way I found the house, already (unfortunately) dilapidated, where Félix Pita Rodríguez was born, on 9th street, corner of 16th. There you can see a plaque as the only connotation of the place. But there the lyrics grow like a romerillo and beat in the voices of its singers, that's how I saw the researcher, poet and repentista Juan Carlos García Guridi.
Bejucal is a beautiful city, a city that invites you to return for its people, for its architectural beauty, for its art and for the party.
This post has been written and documented by me in interview with Roberto Chaviano, it does not contain AI. The photos used are my property
Amigos de @worldmappping cumplí un viejo anhelo de conocer una de las ciudades del sur del occidente de Cuba, Bejucal, perteneciente a lo que llamamos Habana Campo. Esta zona se caracterizan por la coloración rojiza de sus suelos. Pero cuando se dice Bejucal enseguida pensamos en su folklor.
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El arte es prolifero en esta zona, disfruté de los Tambores de Bejucal, portadores de una tradición rumbera de raíces africanas, arraigadas en esta zona del país y declarada Patrimonio Nacional. De su actuacion les traigo un fragmento.
Hice un recorrido por la ciudad, allí en el Museo de Bejucal, me dejé llevar por la gracia del verbo y rica historia que atesora Roberto Chaviano Cabrera, Especialista en Conservación.
Su voz pausada y envidiable memoria me señalaron cada fecha y nombre. "Para mí cada ladrillos, cada teja, cada esquina tiene una historia". Chaviano es bejucaleño de pura cepa
Esa, su pasión por la historia de aquellos lares la cual incluía a su familia, atraparon mi interés de toda la mañana.
Bejucal ostentó desarrollo en la producción del tabaco, mas tarde el azúcar y luego de dar al traste en el ocaso azucarero de la zona, vuelve a tomar fuerza el trabajo tabacalero pero en la manufactura desde los chinchales, medianas industrias locales hasta el asentamiento en la ciudad de grandes y prestigiosas firmas como Henrry Clay and Bock & Co., H. Hupmann o Partagás y otras.
"Bejucal, ciudad acogedora" así rezan las portadas de antiguas publicaciones de esa distinguida y nobiliaria localidad, expuestas en el Museo. Bautizada como San Juan del Bejucal, hacienda perteneciente al Capitán español Juan Nuñez del Castillo, desde 1713.
El 9 de mayo 1714, es la fecha señalada como fundacional por celebrarse la primera junta de Cabildo.
Solo seis entre Villas y Ciudades surgieron por esta forma señorial de fundación.
La estructura de la ciudad y sus antiguas edificaciones, me transportan al siglo XVIII. Retícula original de 35 manzanas fundacionales, divididas en dos cuadrantes por un eje simbólico bien diseñado de los podere: Eclesiástico, Señorial y Pólítico, como creación primigenia de un trazado urbanístico -arquitectónico propio de las ciudades Neoclásicas.
Las construcciones coloniales de los Ss. XVIII y XIX de lo que hoy ocupa el Centro Histórico, evolucionaban en sus estilos, complementándose más tardíamente con el eclecticismo de la modernidad en la etapa republicana. La iglesia fue fundada en Abril de 1722, construida en muros de sillares y cubiertas en artesonado de madera y tejas.
A mi paso encontré la casa, ya ruinosa donde nació Félix Pita Rodríguez, en calle 9, esquina a 16. Pero allí la letra crece como romerillo y late en la voz de sus cantores, así vi al investigador, poeta y repentista Juan Carlos García Guridi.
Allí se aprecia una tarja como única connotación del lugar.
Bejucal es una ciudad hermosa, una ciudad que invita a volver por su gente, por su belleza arquitectónica, por su arte y por la rumba.
Esta publicación ha sido escrita y documentada por mí en Entrevista a Roberto Chaviano, no contiene IA. Las fotos utilizadas son de mi propiedad