Hola, hola a todos por acá. Primero que nada, quiero desearles a todos una feliz víspera de año nuevo y un hermoso 2024. Desde que vi este challenge, dije que sería una buena idea participar porque hacer #MyMotherhoodRecap2023 me ayudaría mucho a exteriorizar tantas cosas que viví este año y soltar, soltar por mi bien y el de mi hija.
Aunque traté de escribirlo desde el día que lo publicaron, no es hasta hoy que justamente puedo sentarme. Este es un momento donde el 2023 en cuestión de vida, de maternidad, de salud y en todo me sigue empujando hasta mis límites y me sigue enseñando.
Del llanto a la felicidad
El 2023 empezó con una angustia que viven todos los padres cuando los niños están en sus años de preescolar, la separación y el llanto. Si bien el primer nivel de María Angélica había empezado en octubre del 2022, esos tres primeros meses fueron horribles tanto para ella como para mí. Ella no disfrutó para nada esos primeros días.
Mi hija venía de llorar todas las mañanas, después que yo me iba; tampoco se integraba con sus compañeros, no jugaba con ellos. Entonces, enero era la prueba de fuego. Durante las vacaciones hablé mucho con ella, le expliqué que no podía estar con ella en el colegio porque yo ya había estudiado todo ese ciclo, que debía jugar y compartir con niños de su edad, entre otras cosas.
Empezamos la primera semana con un poco de llanto, que después de un rato se calmaba. Lo más importante es que mi hija empezó a hacer amigos. Ella siempre hizo todas sus actividades escolares, sin embargo, a medida que se sentía más a gusto, más las disfrutaba.
Así, pasamos de lo que pudo ser un año catastrófico a nivel escolar a tener un aprendizaje social más que todo. No es por nada, pero María Angélica es una niña muy inteligente, solo nos faltaba ese empujón para compartir y vivir nuevas experiencias.
Hello, hello to everyone over here. First of all, I want to wish you all a happy New Year’s Eve and a beautiful 2024. Since I saw this challenge, I said it would be a good idea to participate because doing #MyMotherhoodRecap2023 would help me a lot to externalize so many things I lived this year and let go, let go for my sake and that of my daughter.
Although I tried to write it since the day it was published, it is not until today that I can just sit down. This is a moment where 2023 in terms of life, motherhood, health, and everything keeps pushing me to my limits and keeps teaching me.
From tears to happiness
2023 began with an anguish that all parents experience when their children are in their preschool years: separation and crying. Although Maria Angelica's first level had started in October 2022, those first three months were horrible for both her and me. She did not enjoy those first days at all.
My daughter came from crying every morning after I left; she didn't integrate with her classmates either, she didn't play with them. So, January was the acid test. During the vacations I talked to her a lot, I explained to her that I could not be with her at school because I had already studied that whole cycle and that she should play and share with children her age, among other things.
We started the first week with a little crying, which calmed down after a while. The most important thing is that my daughter started to make friends. She always did all of her school activities, however, as she became more comfortable, the more she enjoyed them.
So, we went from what could have been a catastrophic year at school to having more social learning than anything else. Not for nothing, but Maria Angelica is a very intelligent child, we just needed that push to share and live new experiences.
Nuevas experiencias
María Angélica y yo este año vivimos muchas nuevas experiencias. Dentro de mis posibilidades quise que ella se enfrentará a sus miedos, pero que también disfrutará y aprendiera en cada una de las cosas que hacíamos juntas y por separado. Porque la maternidad se trata de enseñar y aprender en el proceso.
Mi hija en abril comenzó en su academia de baile. Ella desde que nació ha mostrado interés en la música. Con meses ya bailaba. A sus tres años fue muy específica y me pidió ballet. Después de averiguar en varios sitios, nos decidimos y la llevé a la prueba. Su primer día fue magnífico, lo disfrutó tanto. En diciembre tuvo su primera presentación y de verdad que más feliz no puedo estar por ella. Me hace sentir sumamente orgullosa de lo que ha logrado y de su disciplina y amor por el baile.
También nos enfrentamos a su miedo a las alturas. Aunque ella diga que es muy fuerte y valiente, desde chiquita ha demostrado cierto respeto a sitios altos, incluso en parques tan sencillos como los de un McDonald’s. Así que este 2023 la llevé a varios parques que le exigían estar a una altura mucho mayor de la que ella está acostumbrada.
En este sentido, le di la confianza que ella necesitaba. Siempre le he hecho saber que mamá va a estar ahí para ella, apoyándola y ha sido así. Con cada nuevo desafío que enfrentamos por simple que parezca, las dos crecemos, como mamá, como hija, como seres humanos.
New experiences
María Angelica and I had many new experiences this year. Within my possibilities I wanted her to face her fears, but I also wanted her to enjoy and learn in each of the things we did together and separately because motherhood is about teaching and learning in the process.
My daughter in April started at her dance academy. She has shown interest in music since she was born. She had already danced for months. When she was three years old, she was very specific and asked me for ballet. After inquiring in several places, we decided and I took her to the audition. Her first day was magnificent, she enjoyed it so much. In December she had her first performance and I couldn't be happier for her. It makes me so proud of what she has accomplished and her discipline and love for dancing.
We also faced her fear of heights. Even though she says she is very strong and brave, since she was a little girl, she has shown a certain respect for high places, even in parks as simple as McDonald's. So, this 2023 I took her to several parks that required her to be at a much higher height than she is used to.
In this sense, I gave her the confidence she needed. I have always let her know that mom is going to be there for her, supporting her and she has been that way. With each new challenge we face as simple as it may seem, we both grow, as a mom, a daughter, as human beings.
Aprender a aceptar
Si bien, ya habíamos vivido muchas nuevas experiencias, nada me prepararía para lo que sucedería a partir de mayo del 2023. Soy una mamá separada, sin embargo, busqué que el papá y la familia paterna de mi hija hicieran parte de su vida. El problema está en que ellos querían ser parte sin que yo estuviera presente.
Mi hija a sus tres años aún tomaba teta, nuestro vínculo y apego es muy grande, así que ella no había estado en otra parte que no fuera con mamá. Excepto en las horas del colegio. Para mayo del 2023 me enteró de una situación legal, en la que no quiero ahondar mucho, porque como comprenderán es algo muy personal.
Sin embargo, quiero comentarles acerca de esto, porque después de meses de angustia, estrés, mucha tristeza, decepción y demás sentimientos; mi hija cada 15 días tiene que estar con su papá, en su casa por el fin de semana. Y sí, sé que es normal, que es el derecho, lo que corresponde, aunque igual uno se preocupa.
Soy mamá primeriza, desde los 19 años me dijeron que no era muy probable que tuviera hijos, no obstante, quedé embarazada sin tratamientos. Mi hija nació de 8 meses, estuvo 15 días en cuidados moderados. Obvio, me voy a preocupar siempre por ella.
Toda esta situación ha traído cambios, como era de esperarse, cambios que hemos tenido que aceptar todos. Aquí es donde como mamá he tenido que aprender a aceptar que las cosas no van a ser como yo pienso que podrían ser. Ha sido un proceso, pero siempre voy a apostar por el bienestar de mi hija.
Learning to accept
While we had already had many new experiences, nothing would prepare me for what would happen come May 2023. I am a separated mother, but I wanted my daughter's father and paternal family to be part of her life. The problem is that they wanted to be part of it without me being present.
My daughter at three years old was still on the boob, our bond and attachment are very strong, so she had not been anywhere else but with her mom, except for school hours. By May 2023 I learned about a legal situation, which I don't want to delve too much into because as you will understand, it is very personal.
However, I want to tell you about this, because after months of anguish, stress, a lot of sadness, disappointment, and other feelings; my daughter every 15 days has to be with her dad, at home for the weekend. And yes, I know it's normal, it's the right thing to do, it's the right thing to do, although one worries about it all the same.
I am a first-time mother, since I was 19 years old, I was told that it was not very likely that I would have children, however, I got pregnant without treatments. My daughter was born 8 months old; she was in moderate care for 15 days. I will always worry about her.
This whole situation has brought changes, as expected, changes that we have all had to accept. This is where as a mom I have had to learn to accept that things are not going to be the way I think they could be. It has been a process, but I will always bet on my daughter's well-being.
Manejando las emociones
Algo que no solo hemos ido aprendiendo María Angélica y yo este año, sino desde que nació, ha sido a manejar las emociones. Los niños vienen sin saber expresarse. Cuando están bebés, solo pueden llorar si tienen hambre, están para un cambio de pañales, o por cualquier incomodidad.
Entonces, a medida que van creciendo van aprendiendo a hablar, a hacer gestos, a tener una actitud corporal definida. Nosotros como padres, estamos involucrados directamente en ese proceso de aprendizaje y formación de los niños.
Sin embargo, cuando nos convertimos en padres, no tenemos un manual y más bien, venimos con un montón de creencias pre aprendidas que pueden no estar de acorde a como queremos criar a nuestros hijos. En este sentido, creo que muchas de las personas de mi edad no saben manejar sus emociones.
Por esto, me ha tocado que cuando enseño a María Angélica a regular sus emociones, aprender a regular las mías. Darme cuenta, por ejemplo, que estoy cansada y lo que ella está haciendo es lo típico de un niño de su edad, por lo que no debo gritar o estresarme de más.
Es algo que se trabaja día con día. Asimismo, también ves sus frutos en los momentos menos esperados y es algo que te llena como padre.
Managing emotions
Something that María Angelica and I have been learning not only this year but since she was born, has been to manage emotions. Children come without knowing how to express themselves. When they are babies, they can only cry if they are hungry, need a diaper change, or for any discomfort.
Then, as they grow, they learn to speak, to make gestures, and to have a defined body attitude. We, as parents, are directly involved in this process of learning and the formation of children.
However, when we become parents, we do not have a manual and rather, we come with a lot of pre-learned beliefs that may not be by how we want to raise our children. In this sense, I believe that many people my age do not know how to manage their emotions.
Because of this, when I teach Maria Angelica to regulate her emotions, I have had to learn to regulate my own. Realizing, for example, that I am tired and what she is doing is typical for a child her age, so I shouldn't yell or stress too much.
It's something you work on every day. Likewise, you also see its fruits in the least expected moments and it's something that fulfills you as a parent.
Lo más difícil para el final
A todos estos cambios, procesos, experiencias se les sumó que a mi papá le dio un ACV a finales de noviembre. Para María Angélica, su abuelo lo era todo, su superhéroe, su amigo, el que la consentía, todo. Ha sido fuerte para ella, aceptar que por ahora su abuelo no puede cargarla, comprarle, amapucharla.
Pero ella es una niña muy inteligente, así que poco a poco ha ido aprendiendo a manejar la situación. Y en realidad, su abuelo, aunque esté como esté sigue viendo por ella, porque es la niña de sus ojos. La sigue defendiendo y consintiéndola como puede.
Esto es algo, que a todos como familia nos ha tocado, porque mi papá es el pilar de una familia donde él es el único hombre. Siempre nos consintió a todas, resolvió (palabra que está tan de moda), se encargó hasta de lo que tenía que encargarse. Ahora nos toca a nosotras, buscando que mejore y su bienestar por completo.
También este 31 de diciembre, fue la primera vez que no recibía el año con mi niña. Fue un día complicado, porque a todos estos sentimientos encontrados, se sumó una gripe no deseada. Pero como dicen lo que no te mata, te hace fuerte.
Aquí escribiendo esto para ver que empiezo un nuevo año justamente siendo justamente eso, más fuerte de lo que yo pensaba. Me siento orgullosa de mí, porque he pasado muchos obstáculos no solo este 2023, sino en toda mi vida y como mamá, siento que sí lo estoy haciendo bien.
Gracias por llegar hasta acá, por leerme y espero que tengas un hermoso 2024. Sobre todo, recuerda que, si estás pasando por un mal momento, tú eres más fuerte que eso. Y también recuerda que nadie puede juzgarte como madre/padre porque tú, solamente tú conoces lo que estás viviendo.
Les dejo mis redes sociales por si quieren seguirme y un abrazo lleno de todo el cariño del mundo.
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The hardest part of the end
In addition to all these changes, processes, and experiences, my dad had a stroke at the end of November. For María Angelica, her grandfather was everything, her superhero, her friend, the one who spoiled her, everything. It has been hard for her to accept that for now, her grandfather can't carry her, but for her, or even nurse her.
But she's a very smart girl, so she's gradually learned to handle the situation. And, her grandfather, even though he is the way he is, still looks out for her, because she is the apple of his eye. He still defends her and spoils her as best he can.
This is something that has touched all of us as a family because my dad is the pillar of a family where he is the only man. He always spoiled all of us, he solved (a word that is so fashionable), and he even took care of what he had to take care of. Now it's our turn, looking for him to improve and his well-being completely.
Also, December 31, was the first time that I did not receive the year with my little girl. It was a complicated day because, in addition to all these mixed feelings, there was an unwanted flu. But as they say, what doesn't kill you, makes you strong.
Here I am writing this to see that I am starting a new year being just that, stronger than I thought I would be. I feel proud of myself because I have overcome many obstacles not only this 2023, but in my whole life, and as a mom, I feel that I am doing well.
Thank you for making it this far, for reading me and I hope you have a beautiful 2024. Above all, remember that if you are going through a bad time, you are stronger than that. Also remember that no one can judge you as a mother/parent because you, only you know what you are going through.
Text originally written in Spanish and translated by DeepL Translate. Sorry if there are mistakes.
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