En este ahora agradezco a Dios que siendo tan joven logre ingresar a la primera industria petrolera del país; por un periodo ininterrumpido de 30 años, trabajo en el cual abrace reconocimientos al logro por metas cumplidas en grandes equipos de alto nivel de desempeño.

Obtuve beneficios de salud y bienestar o calidad de vida para mi familia e incluso para mí, también bienes adquiridos como casas, carros, viajes, incluso el disfrute de muy buena comida en los mejores restaurantes de la ciudad e incluso fuera del país, en otras fronteras. Todo gracias a mi trabajo en la empresa.

Logre vestir con ropa exclusiva de marcas reconocidas. Tuve muchos pares de zapatos, perfumes, maquillaje, por demás accesorios, entre muchas cosas más.

En el ámbito profesional, la empresa se encargó de formarme, adiestrarme en diferentes áreas del talento humano y en los negocios internacionales, todo para recuperar las reservas remanentes de producción en todos los ámbitos de nuestra primera industria si nos ubicamos en el contexto nacional con calidad de exportación.

Hasta que decidí pensar diferente en relación con la realidad, sociopolítica y económica de este país y como muchos de mis coterráneos fuimos despedidos y después de eso cada día vino con su misterio para ir deconstruyendo lo que ya no me funcionaba y con su milagro para ir edificando en función de lo que debía ser y hacer para fundir mis raíces y florecer apuntando hacia lo nuevo.

Recuerdo que hace tiempo le escuche decir a un hombre de Dios que la Fe nunca niega la realidad, solo se enfrenta a ella.

En efecto, no se trata de obviar ni de ignorar o negar lo que acontece a nuestro alrededor cuando nos equivocamos, sino de desarrollar y superar nuestro miedo para ganar la confianza y sostener una actitud correcta frente a las circunstancias.

Sin duda alguna y con mis razones a cuesta todo lo ocurrido me desato mucha angustia, afectando mi capacidad para discernir entre lo bueno y lo menos bueno, lo falso y lo verdadero, entre lo que quería escuchar y saber y aquello que debía rechazar, porque tal vez me resultaba improductivo.

Ahora bien, prosigo en el contexto de esta experiencia. Todo lo sucedido fue tan extremo que afecto mi salud porque después de eso enferme de cáncer de mama producto de tanto estrés y culpas por lo antes expuesto.

Han pasado más de 20 años de ese devenir, y mi medicina llego cuando logre soltar la angustia que nacía, crecía y se alimentaba de mis pensamientos llenos de ira e indignación por estar reviviendo esos duros momentos a través de la evocación inconsciente.

Son energías que jamás se trasforman, que debes aprender a afrontarla o a vivir con ellas, ¡Tú decides elegir que hacer! Y en líneas generales, estoy clara en que el pasado siempre influye sobre mi percepción del presente, y desencadena respuestas fisiológicas positivas o negativas... Es parte de nuestra naturaleza humana.

¡Es Simple! Nadie aprende en cabeza ajena, la respuesta siempre está en uno mismo y es ahí cuando comienza tu superación personal cuando sueltas el freno de mano y le das rienda al aprendizaje para que llegue lo nuevo, e innovar para generar cambios sustanciales que guarden coherencia entre tu mente y corazón… Es lo que lo hace diferente y significativo para esta vida que toca. ¡Así de bonitos son los cambios es esta vida que toca!.