Pinocchia: A Reverse Cinderella [EN/ES]
What would you do if your mental age clashed with your physical age? (in an intense mind/body battle)
The most famous image of Pinocchio is that of a wooden boy whose nose grows when he lies. But his life’s purpose is equally significant: to become a flesh-and-blood child (as in Steven Spielberg’s A.I.).
Greek director Yorgos Lanthimos, adapting Alasdair Gray’s novel Poor Things, revives the tale of an artificial child by merging it with another creature facing a similar conflict: Frankenstein.
Yet the protagonist of this grotesque drama is a girl: Bella Baxter. See her below⬇️
Emma Stone masterfully embodies Bella Baxter
With an infant’s brain in a woman’s body, Bella fearlessly confronts the world armed with two powerful weapons: innocence and perseverance.
Her father and creator is the brilliant surgeon Dr. Godwin Baxter "God" (Willem Dafoe), a man who has also transcended his own physical and emotional limitations.
The Baxter family and the keen student Max McCandles (Ramy Youssef) support Bella’s personal growth, but two antagonists emerge. "Enamored" princes of this strange Cinderella:
Duncan Wedderburn (Mark Ruffalo), a seducer who’s never accepted "no" for an answer
Alfie Blessington (Christopher Abbott) arrives to claim his marital rights
Yet Bella’s thirst for experimentation and knowledge drives her beyond nearly everything. Through her journeys in Lisbon, Alexandria, and Paris, she discovers pleasure, compassion, obsession, cynicism, and the cruelties of human society. Like a living doll, like an inverted Cinderella, she seeks not love but wisdom and understanding.
Throughout, I was held in suspense by the contrast between Bella’s reckless innocence and the base passions surrounding her. She is like a child in a monster-filled forest, shielded only by her need to experience the world. Her existential motto seems to be: "It doesn’t matter if your body suffers, as long as your brain grows."
The struggle to master her childlike body in an adult world; the identity crisis upon discovering her past; patriarchal oppression and sexual exploitation; the clash with Victorian morality—all swarm like lethal wasps around this "girl," this artificial Pinocchia who seeks not a flesh-and-blood body but a true soul.
Lisbon. A surreal port city was built in-studio. Pastel colors and tilted buildings drew inspiration from Magritte’s paintings, creating a dreamlike tone mirroring Bella’s infantile perception.
The cinematography and oneiric world in this film feel almost alive, parallel to the plot—yet they reflect the eerie beauty shaking Bella’s core. I’m certain frame enthusiasts will revel in these:
All frames are personal captures from my viewing of the film
Pinocha: una Cenicienta al revés
¿Qué harías si tu edad mental contrastara con tu edad física? (en un intenso combate mente/ cuerpo)
La imagen más conocida sobre Pinocho es la de un niño de madera a quien le crece la nariz por mentir. Pero también se ha resaltado su propósito vital: convertirse en un niño de carne y hueso (como en la película IA, de Steven Spielberg).
El director griego Yorgos Lanthimos, adaptando al cine la novela de Alasdair Gray, Poor things, retoma el cuento del niño artificial combinándolo con otra criatura que enfrenta un conflicto similar: Frankestein.
Pero la protagonista de este esperpéntico drama es una chica: Bella Baxter. Mírala debajo⬇️
Emma Stone encarna maravillosamente al personaje de Bella Baxter
Con un cerebro de bebé en un cuerpo de mujer, Bella va a enfrentar temerariamente al mundo con dos poderosísimas armas: la inocencia y la perseverancia.
Su padre y creador es el brillante cirujano, Dr Godwin Baxter "God" (Wilhelm Dafoe), alguien que también se ha superado a sí mismo, física y emocionalmente.
La familia Baxter y el discípulo avezado Max McCandles (Ramy Youssef), están a favor del crecimiento personal de Bella, pero surgen dos antagónicos. Unos príncipes "enamorados" de esta extraña Cenicienta:
Duncan Wedderburn (Mark Ruffalo) es un seductor que nunca ha aceptado un no como respuesta
Alfie Blessington (Christopher Abbott) viene a reclamar sus derechos conyugales
Pero la sed de experimentación y conocimientos de Bella la empuja por encima de casi todo. En sus viajes por Lisboa, Alejandría y París descubrirá el placer, la compasión, la obsesión, el cinismo y las crueldades de la sociedad humana. Como una muñeca viviente, como una Cenicienta invertida, no buscará el amor sino el saber, el conocimiento.
Todo el tiempo me mantuvo en suspenso el contraste entre la temeraria inocencia de Bella y las bajas pasiones que la rodean. Es como una niña en un bosque repleto de monstruos, amparada solamente por su necesidad de experimentar el mundo. Su divisa existencial parece ser: "No importa que tu cuerpo sufra si tu cerebro crece".
La lucha por dominar su cuerpo infantil en un mundo adulto; la crisis de identidad al descubrir su pasado; la opresión patriarcal y la explotación sexual; el choque con la moralidad victoriana, circundan como un enjambre de avispas letales a esta "niña", a esta Pinocha artificial que más que un cuerpo de carne y hueso busca conseguir un alma de verdad.
Se construyó una ciudad portuaria surrealista en estudio. Los colores pastel y edificios inclinados se inspiraron en pinturas de Magritte, creando un tono onírico que refleja la percepción infantil de Bella
La fotografía y el mundo onírico reflejado en esta película casi que tienen vida propia, paralela a la trama, pero no es así, reflejan la tenebrosa belleza que sacude el interior de Bella. Estoy seguro que harán las delicias de los amantes de los fotogramas:
Todos los fotogramas son capturas hechas por mí durante la visualización del filme
