El primer punto interesante de la película es la amnesia anterógrada, la cual es una alteración en la memoria que le impide a la persona, en este caso Leonard, poder retener cualquier nuevo recuerdo por un periodo prolongado. En otras palabras es incapaz de recordar cosas nuevas, todo lo que puede alcanzar a recordar son cuestiones anteriores al trauma.

Por supuesto esta afectación está contextualizada en la ficción, sin embargo, es algo que puede pasar en la realidad, si bien no necesariamente involucra un misterio, lo cierto es que sí se debe a lesiones cerebrales causadas por golpes fuertes en la cabeza, por lo que el accidente que sufre Leonard y su consecuencia es completamente plausible. Como dato aparte, el lóbulo temporal es donde se ubican las estructuras encargadas de la memoria, por lo que el hecho de que el golpe sea justamente en esa zona es un detalle sutil pero acertado.

Por otro lado, aparte continuando con los aspectos de psicología incluídos en la trama, Leonard parece funcionar después del trauma bajo las bases del condicionamiento, es decir, aprende y asocia por repetición de los estímulos. Cuando intenta resolver el misterio no es que mágicamente logre almacenar recuerdos nuevamente, sino que utiliza técnicas para poder recordar cosas que de alguna manera ya sabía antes. Las polaroids y los tatuajes en este caso son lo que en psicología se le llama estímulos que tienen un determinado significado. Leonard al ver los estímulos es cuando logra asociar su significado con aquello que busca, y es así como poco a poco va logrando resolver el enigma.

Es una teoría básica de la psicología pero que funciona bastante bien en la trama, no se siente como un deus ex machina para lograr explicar las acciones del protagonista de manera forzada, más bien demuestra la disciplina, el carácter y la inteligencia del personaje.

Por supuesto es una historia interesante, pero lo que le agrega aún más intriga y es realmente la magia de la película es la cronología inversa. En pocas palabras, el orden cronológico es narrado empezando por lo que es casi el desenlace de la historia, así que como si de una cuenta regresiva se tratara, yendo hacia atrás es que poco a poco vamos descubriendo lo que realmente pasó. Esta decisión del director no sólo hace que la película sea más entretenida e intrigante, sino que también considero que de alguna forma es como ver todo desde la perspectiva del mismo protagonista puesto que él también debe retroceder en el tiempo para comprender lo que ocurrió, lo que ahora está pasando y lo que puede llegar a suceder.

Creo que este recurso de la narración no lineal aunque haya sido utilizado millones de veces por millones de directores y el mismo Nolan, honestamente me parece que nunca aburre. Es una parte del thriller que si se logra hacer adecuadamente no resulta predecible. La cuestión está en hacer adecuadamente el plot twist generando la tensión necesaria proporcionando sólo la cantidad justa de pistas, apenas dejando entrever ciertas cosas pero no demasiado para que al final todo sea una verdadera sorpresa. Para mí Nolan logró esto perfectamente en esta película.

Poco más queda por decir aparte de que sin duda alguna los actores también contribuyeron a que esta película sea tan entretenida de ver. Se meten de lleno en sus papeles, sobretodo Guy Pearce quien interpreta al protagonista. El actor logra transmitir la esencia soberbia del personaje, su tenacidad, inteligencia y frustración. Fue una interpretación genial.

En muchos aspectos esta película vale la pena de ver al menos una vez puesto que querrás resolver el misterio con tantas ansias como su protagonista. Es un ejemplo de una excelente obra de arte. Te la recomiendo totalmente, y si ya la has visto, déjame saber en los comentarios tu opinión✨