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Antes de comenzar, es importante que quienes se atreven a leer estas líneas, se encuentren sintonía conmigo en cuanto a "ironía" se refiere. El camino más obvio para hacerlo es tomando en consideración lo que la RAE nos ofrece para entender un poco más este concepto. Sería algo más o menos así.
1. f. Burla fina y disimulada.
2. f. Tono burlón con que se expresa ironía.
3. f. Expresión que da a entender algo contrario o diferente de lo que se dice, generalmente como burla disimulada.
En esencia es la burla la que se hace presente en el uso de la ironía, pero que cruel puede ser, cuando actúa de formas que nosotros como usuarios no queremos. Sin más que decir les muestro los dos actos.
ACTO I: Con la seriedad del asunto.
Se levanta de prisa Rubén, un buen desayuno y vestirse con el traje caro, y luego de una fresca noche de sueño, se dispone a salir impecable por la puerta de madera fina, hoy por fin será promovido y los lujos le sonreirán a la cara. Tiene todo preparado para esa importante junta que estuvo preparando por meses.
Se nota nervioso, pero lo genial de los trajes de ejecutivo, es que los nervios se disfrazan de creatividad. Su idea revolucionaría a todo el planeta, siempre y cuando tuviera la aprobación de la junta, Nada podía salir mal.
Era momento de mostrar su propuesta, que dejaría sorprendido a propios y extraños, era simplemente lo mejor que se podía presentar, y allí estaba, un triunfador a punto de dar un gran paso.
Ya podía sentir las felicitaciones del conglomerado pero... nada, por el contrario, lo único que se pudo escuchar fueron RISAS. Pero no de esas risas que te brindan seguridad, eran risas que te daban a entender que eras un payaso para ellos, Rubén no lo podía creer, quería marcharse a otro lado, pero no podía, el era el capitán de su propio Titanic.
Pasado el mal rato, era obvio que la junta fue divertida por lo ridícula que fue para aquellos inversores que veían lo inviable de la propuesta del joven. "Usa esa mente brillante para cosas menos irreales, y te irá mejor, nos vemos el lunes, disfruta tu fin de semana, y por favor, llega a primera hora, nos retrasaste con esta... reunión".
El mundo se le vino encima, pero un adulto responsable, no se queda lamentándose en su oficina, un adulto responsable hace lo que debería hacer: Irse a un bar para ahogar sus penas y lamentarse con alcohol.
Acto II: Risas en lata, gratis para todos.
Bilbo saldrá a la escena esta noche, con un inolvidable show, por fin podrá hacer lo que siempre quiso: Un comediante. La noche de las risas comenzó fuerte, con comedías dignas de un especial de Netflix, el compromiso es grande, pero las buenas noticias son que el público está disfrutando de la velada, y ellos se ríen con cualquier cosa. Fascinante.
Por fin podría mostrar ese humor que tanto le caracterizaba en las reuniones familiares, cadenas de WhatsApp y memes en Facebook, por lo que sabía que su flamante momento ya había llegado. Era el tercero en salir, y aunque la vara estaba alta, desde aquí insistimos, nada puede salir mal.
¡Comenzó la rutina! pero nada...quizá las risas estaban por llegar, pero el sonar de los grillos fue el que se apoderó del escenario. ¡Ya sé! Será mejor sacar la artillería pesada de una buena vez, eso seguro que les encantará Bilbo… pero de nuevo, nada.
Aquel ambiente genial, se vio empañado de una seriedad que solo se consigue en un funeral, y francamente era incómodo. Ni siquiera el punchline sirvió para soltar una carcajada. Les causó más gracia que un tarado con un traje de ejecutivo se le quedara atorado un maní en la barra. Claramente era el fin del pobre Bilbo, que se bajó del escenario mientras nadie lo veía. Por fortuna, el DJ puso algo de música para suavizar el ambiente.
Bonus track. Acto III: Pensamientos.
Mientras la gente aún se recuperaba de lo que parecía ser un deplorable acto de comedia, ya Rubén llevaba horas en el bar, luego que saliera de la oficina después de un día muy tomentoso. Pensó que era la noche de comedia había terminado porque ya nadie se reía de aquel que estaba en el escenario.
Si algo podía salir peor, pues saldrá peor, casi se atraganta con un maní, y nuevamente la gente se reía de él, como si no tuviera suficiente con lo sucedido en la mañana.
En el otro extremo, Bilbo, quien le pidió al barman un trago fuerte, para tratar de olvidar que el público no sintiera nada con su poderosa rutina. Esa gente podía reírse hasta de la foto de un aguacate, pero no de Bilbo. Luego de unas horas, Bilbo se dio cuenta que el desdichado borracho del otro extremo, era aquel que demostró que su rutina era un asco, por lo que se acercó a él, para felicitarlo., después de todo, el si parecía divertido.
"Usted si que sabe hacer reír a la gente, lo felicito, debe ser todo un comediante" dijo Bilbo. "Mi intención no era esa mi amigo, me disculpo, pero hoy me salió todo al revés, quisiera más bien que usted me prestara la seriedad que demostró durante su rutina, o mejor le invito un trago". Respondió Rubén con cara de derrotado.
Y allí conversaron dos hombres, que hicieron de la ironía toda una vivencia, aquel que hablaba en serio, y causó gracia a quienes se dirigía, y el comediante que no recibió ni una sonrisa, sentados en un bar, preguntándose, ¿Qué tiene él que no tenga yo?
Before I begin, it is important that those who dare to read these lines find themselves in tune with me as far as "irony" is concerned. The most obvious way to do so is to take into consideration what the Cambridge University offers us to understand this concept a little more. It would be something like this.
a situation in which something which was intended to have a particular result has the opposite or a very different result
In essence it is the mockery that is present in the use of irony, but how cruel it can be, when it acts in ways that we as users do not want. Without further ado, I show you the two acts.
ACT I: With the seriousness of the matter.
Ruben gets up in a hurry, has a good breakfast and dresses in an expensive suit, and after a fresh night's sleep, he is ready to go out impeccable through the fine wooden door, today he will finally be promoted and the luxuries will smile in his face. He has everything ready for that important meeting he has been preparing for months.
He looks nervous, but the great thing about executive suits is that nerves are disguised as creativity. His idea would revolutionize the whole planet, as long as he had the approval of the board, nothing could go wrong.
It was time to show his proposal, which would surprise all and sundry, it was simply the best that could be presented, and there he was, a winner about to take a big step.
He could already feel the congratulations of the conglomerate but... nothing, on the contrary, the only thing that could be heard was LAUGHTER. But not of those laughs that give you security, they were laughs that gave you to understand that you were a clown for them, Ruben could not believe it, he wanted to go somewhere else, but he could not, he was the captain of his own Titanic.
After the bad time, it was obvious that the meeting was fun because of how ridiculous it was for those investors who saw the unfeasibility of the young man's proposal. "Use that brilliant mind for less unrealistic things, and you will do better, see you Monday, enjoy your weekend, and please be there first thing, you delayed us with this... meeting."
The world came crashing down on him, but a responsible adult doesn't stay in his office lamenting, a responsible adult does what he should do: Go to a bar to drown his sorrows and lament with alcohol.
Act II: Laughter in a can, free for everyone.
Bilbo will take the stage tonight, with an unforgettable show, finally getting to do what he always wanted: A comedian. The night of laughs started off strong, with comedy worthy of a Netflix special, the commitment is great, but the good news is that the audience is enjoying the evening, and they'll laugh at anything. Fascinating.
He could finally show that humor that he was so characteristic of family gatherings, WhatsApp stories and Facebook memes, so he knew his brand new moment had arrived. He was the third to go, and although the bar was high, from here we insist, nothing can go wrong.
The routine began! but nothing… maybe the laughs were coming, but the sound of crickets took over the stage. I know! Better bring out the big guns for once, they'll love Bilbo for sure… but again, nothing.
That cool atmosphere, was marred with a seriousness you only get at a funeral, and frankly it was uncomfortable. Not even the punchline was enough to get a laugh. They were more amused that a moron in an executive suit got a peanut stuck on the bar. It was clearly the end of poor Bilbo, who got off the stage while no one was looking. Fortunately, the DJ played some music to lighten the mood.
Bonus track. Act III: Thoughts.
While people were still recovering from what seemed to be a deplorable comedy act, Ruben had been at the bar for hours after he left the office after a very busy day. He thought the comedy night was over because no one was laughing at the guy on stage anymore.
If anything could go worse, it would go worse, he almost choked on a peanut, and again people were laughing at him, as if he didn't have enough of what happened in the morning.
At the other end, Bilbo, who asked the bartender for a stiff drink, to try to forget that the audience felt nothing with his powerful routine. These people could even laugh at a picture of an avocado, but not at Bilbo. After a few hours, Bilbo realized that the drunken wretch at the other end was the one who proved that his routine sucked, so he went over to him to congratulate him, after all, he did look funny.
"You sure know how to make people laugh, I congratulate you, you must be quite a comedian" said Bilbo. "My intention was not that my friend, I apologize, but today I got it all backwards, I would rather you lend me the seriousness you showed during your routine, or I'd better buy you a drink". Ruben replied with a defeated look on his face.
And there two men conversed, who made irony into an experience, the one who spoke seriously and made fun of those he addressed, and the comedian who did not even receive a smile, sitting in a bar, wondering, What does he have that I don't?
