Hola amigos de Lifestyle, ¿cómo están? Espero que estén disfrutando de una linda noche. Les doy la bienvenida a otro episodio de mi vida, donde hoy quiero compartir con ustedes una de esas pequeñas cosas que me hacen feliz, preparar perros calientes caseros con mi novio. Ya en publicaciones anteriores les he contado cuánto me encantan, y esta vez no fue la excepción.
Aunque no teníamos todos los ingredientes ideales, no quisimos dejar pasar la oportunidad de disfrutar de este antojito. Teníamos lo más esencial, pan, salchichas, papas, salsa rosada y un quesito especial que solemos usar y que le da un sabor delicioso. Nos hubiera gustado tener más toppings, como cebolla caramelizada, tocineta o repollo, pero como dice mi abuela, “Con lo que hay, se hace la magia”.
La verdad es que quedaron muy buenos. Yo tenía bastante hambre y terminé comiéndome cuatro. ¡Sí, cuatro! Y no me arrepiento porque quedaron deliciosos. A veces, lo más sencillo termina siendo lo más sabroso, sobre todo cuando se hace con cariño y en buena compañía.
Mi novio me tomó unas fotos durante el momento para que pudiera compartirlas con ustedes. Espero que les gusten y que disfruten ver un poco de esta parte tan cotidiana y especial de mi vida. Ya estoy deseando que llegue la próxima vez para preparar más, y ojalá con muchos más ingredientes.
¡Gracias por leerme y nos vemos en el próximo post!
English
Hello Lifestyle friends, how are you? I hope you're enjoying a lovely evening. Welcome to another episode of my life, where today I want to share with you one of those little things that make me happy: making homemade hot dogs with my boyfriend. I've told you how much I love them in previous posts, and this time was no exception.
Although we didn't have all the ideal ingredients, we didn't want to pass up the opportunity to enjoy this treat. We had the bare essentials: bread, sausage, potatoes, pink sauce, and a special cheese we usually use that gives it a delicious flavor. We would have liked more toppings, like caramelized onions, bacon, or cabbage, but as my grandma says, "What you have makes the magic."
The truth is, they turned out really good. I was quite hungry and ended up eating four. Yes, four! And I don't regret it because they were delicious. Sometimes the simplest things end up being the tastiest, especially when made with love and in good company.
My boyfriend took some photos of me during the moment so I could share them with you. I hope you like them and enjoy seeing a glimpse of this everyday yet special part of my life. I'm already looking forward to the next time I make more, hopefully with many more ingredients.
Thanks for reading, and see you in the next post!
Créditos: Fotos fueron tomadas de mi teléfono Redmi 9
Traducción: Google Translator