The year was 1926 and with it the construction of the Havana Malecon, the same has witnessed countless important events in the country, but there is an equation that is repeated over and over again and I think it will be so for a long time ,and that is the presence of fishermen who day after day come to the legendary wall to try their luck with their fishing rods.Some do it for entertainment and to get some money from the sale of their catch, most of them try to take home a different menu, either way they will always be there to add to the magic of the place, without them it would not be the same, I love to come back again and again to that wall,here is the evidence.
Corría el año 1926 y con el la construcción del Malecón de la Habana,el mismo ha sido testigo de innumerables e importantes acontecimientos del país,pero hay una ecuación que se repite una y otra vez y creo será así por mucho tiempo, y es la presencia de pescadores que día tras día se acercan al legendario muro para probar suerte con sus cañas de pescar.Algunos lo hacen por entretenimiento y sacar algo de dinero en la venta de su captura,la mayoría por intentar llevar a casa un menú diferente.De cualquier manera siempre estarán allí para aumentar la magia del sitio,que sin ellos no seria igual.A mi cómo a ellos también me encanta regresar una y otra vez a ese muro y aquí les dejo alguna evidencia.
