Nada de extraordinario encontraras en estas líneas, solo la vaga e incompleta biografía de un ser que fue adjudicado a las especies de los mamíferos, llamados: seres humanos.

Así comienza mi historia, o bueno... una pequeñísima parte de ella. Nací en medio de las inquebrantables fuerzas de una mujer, entre sudor, lagrimas, sufrimiento y sangre; sobre todo extremo dolor. Aquella mujer, la vida, me la obsequio como un ángel, mi ángel exclusivo de la guarda que años después llamaría: Madre. Aún recuerdo esa nublada noche del 23 de enero del año 1989... ¡Mentira!, 😂😅😂😅 ¿Cómo voy a recordar mi nacimiento?😂😅😂😅. Volviendo a lo que íbamos, como te darás cuenta ya voy a flor de la tercera (3) década, para ser exactos, 34 años total y plenamente cumplidos. Cómo dicen algunos:"ya casi tengo un pies en el más allá y otro aquí".

Atravesando todas las etapas de mi niñez y dando un enorme salto al ahora me encuentro este día resumiéndote 34 años de mi vida, vaina que no es nada fácil de hacer y que tampoco haré en su totalidad, ya que de hacerlo, dejaras de leer esta publicación de lo tediosa y nada interesante que es.

Por cierto, mi nombre: Diego Guedez, es todo un placer y un gusto conocerte. Sería de mucho agrado que dejaras en la caja de comentarios el link de tu introducción, así nos conoceremos mejor.

Me encuentro en un país pequeño pero de inmenso valor y de inigualables riquezas, su tierra y sus minerales son el tesoro que cubren sus fronteras. Lugar que dio a luz guerreros valientes, los cuales libraron, años atrás, cruentas guerras, rompiendo yugos, cadenas y unos cuantos huesos a su paso.

Vivo con dos Gatos, una hembra llamada: Siri, y un macho llamado: Dalan, ambos juguetones y fuera de todo orden, ¿pero que se le hace? así los queremos.

Cómo cualquier otro mortal de este hermoso planeta contaminado tengo una profesión, la cual, se ejerce cada noche de martes a domingo en: bares, club nocturnos y restaurantes. Lugares que para muchos son considerados de relajación, para el disfrute y el compartir, pero para mí se trata de trabajo, de llevar comidas, bebidas y tragos de un lugar a otro alrededor de 12 horas continuas sin casi poder tomar un descanso, porque hasta la cena debo consumirla en cuestiones de unos pocos minutos. Esto es debido a que muchos dueños consideran al empleado un ser que merece ser humillado y mal tratado por el simple hecho de que son la clase baja de sociedad. Y no, no me estoy quejando, simplemente hablo la realidad que se vive como mesero, camarero o vendedor.

Con el pasar de los años el destino me dio la oportunidad de emprender y logré crear un pequeño negocio de comida fritas, como es el caso de: papas, plátanos (toston) y yuca, todas en rebanadas finas freídas en aceite vegetal. Mi negocio llegó a un nivel tal, que en pocos meses podría llamarla: mi pequeña empresa, una nómina de 20 empleados con horarios fijos y sueldos que superaban el salario mínimo de aquel entonces.

Tres veces fueron los intentos de surgir, pero la inclemente inestabilidad de la economía de mi país, logró, que bajo mi falta de experiencia, quebrase.

Hoy por hoy estudio de forma autodidacta la especulación de acciones, criptomonedas, divisas entre otros, en lo que se conoce como trading, Y mientras avanza el tiempo mejor lo hago, cosa que es gratificante para mí.

Soy usuario de Steem que perdió su llave maestra. Fue un total descuido, me justifico alegando que dejé de usar la plataforma hace años atrás y cuando fui a recuperar mi cuenta el disco duro donde almacené toda la información se encontraba dañado, es por esa razón que hoy ves y lees de mí.

En la parte de abajo compartiré el link de mi antiguo usuario por si deseas echarle un ojo. Tengo algunos poemas, relatos de terror, eróticos y una pequeña novela que dejé inconclusa, además de algún cuento que probablemente te guste.