Este titulo puede parecer una auto contradicción, ya que la imagen popular del satanismo es la de la anti-moralidad, o amoralidad. Sin embargo, el satanismo verdadero enseña la 'divinidad' del Yo, del ego, el satanista como la 'más alta encarnación de la vida humana'.
Orgullo, Sabiduría, Individualidad, son los tres pilares sobre los que puede ser construida la "moral Satánica", una moral proclamadora de la vida, que confronta todos los valores de nuestros días, con su trivialización de la vida, gustos masivos, conformidad y sumisión 'rebañera'. Una moral Satánica que demanda del individuo una fuerza férrea tanto física, mental y de voluntad, las mismas cualidades que hace mucho tiempo habían sido necesarias para la supervivencia y la evolución de toda especie, las cualidades que hoy harían del Satanista 'la más alta encarnación' de la vida humana'.