Hola amigos, compañeros autores, Steemians! Soy @knozaki2015
Hoy me gustaría presentaros un nuevo blog de mi amigo @paa. Son dos hermanos de Alemania que escriben sobre la gente. La gente es maravillosa, y su blog es sobre ellos.
Se han dado cuenta que existen muchas personas con historias increíbles que contar. Historias sobre experiencias que merecen la pena ser contadas y compartidas. Historias sobre personas con personalidades fuertes, experiencias únicas y hechos reales. Historias emotivas, escritas por y para gente que son una inspiración. Son sobre personas que se atrevieron a ser diferentes. Todas estas historias son las que os quieren contar.
Sean sus historia la inspiración para que seas diferente. Ser diferente no quiere decir no ser parte de una comunidad, ser diferente significa encontrarse cómodo con lo que uno hace, independientemente de lo que las “masas” puede pensar.
Las personas son maravillosas! Todos y cada uno de nosotros lo somos!
Su primera historia es sobre alguien que ha sido amigo suyo desde hace mucho tiempo. Le llamaremos “Phoenix”. Él se atrevió a ser diferente, y a lo largo de los años aprendió exactamente lo que esto significaba.
Como el fuego cambió mi vida.
(una historia sobre dolor, sufrimiento y el Phoenix de las cenizas)
Desde que tengo uso de memoria,he sentido que había algo diferente en mí. Pensaba diferente, actuaba diferente, hablaba diferente. Debido a esto, encontrar muchas resistencias a lo largo de mi vida.. Al principio no me daba cuenta de que el diferente era yo. Para mí, todos los otros eran uso “pringaos”.
De todo lo mencionado me di cuenta más tarde en la vida, cuando fui lo suficientemente mayor para darme cuenta de lo que había sucedido.
Fue cuando estaba en la guardería que me di cuenta por primera vez de lo de “ser diferente”. Cuando tenía 6 años me gustaba mucho disfrazarme. Quería disfrazarme a cualquier hora, en cualquier lugar, con cualquier motivo, preferentemente en la guardería. Mi abuela hasta llegó a coserme una capa de Superman.
Una mañana, en mi sexto cumpleaños, me escape muy pronto de mi habitación (no podía dormir más). Eché un vistazo a mis regalos a escondidas, y no podía creer lo que veían mis ojos. Encontré lo que más deseaba:
El disfraz del Power Ranger rojo! Como no podía ser de otra forma, tome la firme determinación de llevar este disfraz durante todo el día en el colegio, lo cual hice con consecuencias fatales.
Durante el recreo hubo varios de los otros niños que me arrojaron piedras. Una de las mismas era un poco más grande que una pelota de golf. Me golpeo tan fuerte que rompió mi máscara en varios trozos, y me produjo una herida en la sien izquierda. Corrí hasta la enfermería en shock, llorando y sangrando. Me curó la herida y me mando a mi casa solo, sin nadie que me acompañara. Cuando llegué, me arroje llorando en los brazos de mi madre. Estuve toda la noche llorando.
Por supuesto, era los otros niños los que eran culpables de esto. En cualquier caso, ya no podía disfrazarme para ir a la guardería. Los otros chico me aseguraron que me arrepentiría inmediatamente si lo hacía. Después de la experiencia,no quería regresar.
Me pregunté como la gente podía llegar a ser tan mala. Porque me tiraron piedras solo por llevar un disfraz?
Lo realmente grave de todo, no era la herida que me había hecho en la sien, era las heridas que me habían hecho en el corazón. Los niños pueden llegar a ser muy crueles. Cuanto más mayores se hacían, pero se ponía la situación. Tuve que sufrir su rechazo varias veces más mientras crecía.
Después de los últimos días de la escuela primaria, solo tenía un amigo en clase. Mi sitio estaba en medio de la clase, me sentaba solo y nadie estaba autorizado a hablar conmigo. Mi madre tenía que venir al colegio con cierta regularidad, solo para escuchar lo malo que era. Ni siquiera hace falta mencionar que mi profesor no me podía soportar.
Ya en la escuela secundaria, algunos de mis compañeros de clase me amenazaron durante el primer recreo. Me pegaron chicle en el pelo que me había teñido de color rojo y que me había dejado crecer hasta los hombros. Esta solo fue la primera trastada de muchas. Mi mochila era robada y arrojada por la ventana con regularidad, mi bici la robaban o destrozaban a patadas. Me robaron todas mis cartas de Pokemon durante una de las clases de deporte, y más de una vez algunos grupos de chicos me increpaban y molestaban. Mi profesor quería que tomará Ritalin, ya que suponía que padecía el Síndrome de Deficit de Atención. Durante un viaje de la clase fue el único de los estudiantes que no tenía un asiento asignado, así que tuve que decidir entre sentarme en medio del pasillo o encontrar a alguien que quisiera compartir su asiento conmigo.
Cuando cumplí 21 años, asistí a la escuela vocacional, pero las cosas se pusieron tan mal que lo tuve que dejar, lo cual no cambió mucho mi situación, pero me dio algo de tiempo.
Creo que lo único que impidió que hiciera algo realmente estúpido fue el amor de mi madre. un amor tan brillante y cálido como el sol, irradiado desde el corazón, profundamente sincero y honesto.
El día en que todo cambió
Una vez acabé mi educación vocacional, me invitaron a participar en un entrenamiento mental que incluía andar sobre el fuego de la madre de un amigo. No sabía de mis experiencias, pero probablemente sospechase algo. No tenía ni idea de que pensar sobre este hecho, así que fue con sentimientos encontrados.
Había unas 20 personas participando en el evento, el cual duró todo el día. Nos guiaron a través de varios ejercicios, los cuales tenían como objetivo prepararnos mentalmente para caminar sobre el fuego y abandonar todos nuestros miedos y heridas internas. Debíamos prepararnos para escribir un nuevo capítulo del libro de nuestras vidas.
El último ejercicio consistía de dos partes diferentes: Primero tendríamos que decirle a los otros participantes todas nuestras experiencias radicales, hablar sobre nuestros miedos y preocupaciones (nunca podrás imaginarte lo fácil que esto es!). Después de esa profunda charla, nos pidieron que lo escribiéramos todo en un papel.
Durante la segunda parte, tuvimos que apilar una gran cantidad de madera y encenderla. No dijeron que tiraremos el trozo de papel a la hoguera, uno detrás de otro.
No sé porqué, pero estaba temblando. El calor del fuego me golpeo en la cara, pero no me di cuenta ya que toda mi atención estaba centrada en el trozo de papel, no notaba ni sentía el resto de lo que a mi alrededor ocurría. Mi mirada estaba vacía, todo lo que podía pensar era el odio, la humillación, el sufrimiento que había tenido que padecer. todos estos sentimientos se encontraban combinados en el pequeño trozo de papel. Arrojé el papel cargado con todas las emociones al fuego. Inmediatamente ocurrió algo muy extraño, me sentí ligero, a cada momento sentía la carga que había sobrellevado durante los últimos 15 años desaparecer, como el papel en el fuego.
Para superar todo esto y dejarlo todo atarás, debo hablar de la llama, la cual tenía una temperatura de unos 800 grados centígrados. No te puedes hacer una idea de como de caliente esto es hasta que te encuentras enfrente de ello. Era invierno, hacía unos 6 grados, y una camisa y unos pantalones vaqueros eran lo único que necesitaba para mantenerme caliente.
El resurgir del Phoenix
Todos lo present uno quitamos los zapatos y nos situamos alrededor de las brasas calientes. Nuestro coach nos pregunto quien sería el primero, y me miró directamente a los ojos. Dí un paso al frente si decir nada. Me cogió de las manos y nos fumes hasta el principio del sendero. Se colocó detrás mío, y poniendo sus manos sobre mis hombros me suture al oído “deal todo atrás”. Entonces me soltó. En ese preciso momento se hicieron presentes mi 15 años anteriores. El odio surgió en mí instantáneamente, ese odio hacia las personas que me habían causado todo el terrible daño que sufrí. De repente, surgió la necesidad de dejarlo todo atrás para siempre. Quería empezar de nuevo con toda la fuerza de mi corazón.
La noche es más oscura antes del amanecer
Estaba congelado, paralizado por mis emociones, mi odio, no me podía mover, no comandaba mi cuerpo. Dudando, aterrorizado, me pregunté, que ocurriría si todo esto no acabase, si todas estas cosas terribles me siguen sucediendo? De repente, escuche una voz en mi cabeza que me preguntaba “cuanto lo deseas, de verdad quieres empezar una nueva vida? Con todas mis fuerzas grité “Si, quiero!”.
Súbitamente mi cuerpo empezó a moverse de nuevo, empecé a andar. No me percaté de las brasas ardientes bajo mis pies. Ningún dolor de este mundo podría haberme detenido, estaba dentro de un túnel, enfocado en un nuevo capítulo de mi vida. Ya no dudaba, y con un último movimiento anduve hacía mi nueva vida. Estaba confundido por la alegría, me di cuenta de que lo había hecho! Fantástico! Pronto llegaron los demás para felicitarme. Los siguientes 30 minutos estuve extasiado, mi pecho henchido de orgullo. Nunca había experimentado algo parecido con anterioridad, hasta el mismísimo Arnold Schwarzenegger me habría tenido envidia, mi autoconfianza era enorme. Era como si hubiera ganado el mundial de fútbol. Una hora después de haber andado sobre las brasas me dci cuenta de lo que en realidad había ocurrido, todavía no podía creerlo. Dos horas más tarde me acomodaba en mi cama. Me quede despierto un buen rato, pero os puedo decir una cosa, nunca he dormido tan bien como lo hice esa noche.
6 meses después de esta experiencia, cambié mi vida por completo.