En algún momento estuve aqui, enfocandome tanto en la oscuridad sin encontrar salida, lamentandome por las acciones que me hicieron llegar hasta este punto, sin perdonarme y culpandome de cada cosa que se me ocurria.
Si, estaba aqui, en lo mas profundo del abismo, cegada por la inmensidad de mi alma oscura y manchada, tocando fondo sin saber como subir.
Hoy estoy en el mismo lugar, y me doy cuenta de que fue lo mejor que pudo pasar.
Creo que a todos nos pasa, todos pasamos por un momento de oscuridad, centrados tanto en lo gris, que no vemos hacia otra dirección, pero te limitas, paras y empiezas a renacer.
Aprecias lo bueno y lo malo, evolucionas y te llenas de luz, justo allí tu vida cambia y agradeces cada dia lo aprendido.
La oscuridad es eso que necesitamos en nuestras vidas para florecer, para purificarnos y para apreciar cada una de las experiencias vividas.
He aqui el mejor ejemplo de un ser humano en medio de la oscuridad.
Desde ese dia ya no le temo a la oscuridad y solo me enfocó en las pequeñas cosas que nos regala la vida para renacer cada mañana.
Este amanecer lo capture en septiembre de 2016, en Puerto Cabello-estado Carabobo-Venezuela y guardo las fotografías como un lindo regalo, que me recuerda los bellos placeres de la vida.
Saludos.