Capitulos anteriores: uno, dos, tres, cuatro y cinco
ESC. 13: INT. ZONA DE INTERROGACIÓN, CENTRAL DE LA FUERZA POLICIAL DE ORDEN. DÍA.
Alexander con desespero, intenta por todos los medios zafar sus manos de las esposas, pero no lo consigue. Laila solo mira el techo. El tiempo transcurre, hasta que Theo entra apresurado.
(Agitado)
De acuerdo, los soltaré y
deberán seguirme, es un largo
camino hasta la represa.
Alexander y Laila, anonadados no saben que responder.
(Gritando)
¡Muévanse antes que sea tarde!
Alexander se ríe y abraza rápidamente a Laila, antes de salir corriendo detrás de Theo por el largo pasillo que los lleva al estacionamiento.
ESC. 14: EXT. CARRETERA, VÍA HACIA NATÁN, ZONA CERO. TARDE.
El paisaje desértico a medida que el vehículo va pasando zona tras zona, mejora sin duda alguna. El cielo cubierto de espesas nubes grises, arboles y pasto seco se extiende sobre el panorama, Laila y Alexander miran sin poder ocultar su sorpresa ante la altura de los arboles.
En Cantaura no tenemos cosas así…
¿Ahora si crees que nos
están matando de sed?
Visiblemente incomodo, Theo, aprieta el volante con sus manos, no puede entender a ciencia cierta el porqué les cree. Seguro es porque nunca reciben informes de mortalidad.
Probablemente pierda mi trabajo,
pero voy a creer en su palabra,
aún averiguo el porqué.
Laila y Alexander se sonríen en una rápida conversación silenciosa. Ambos están vestidos con uniformes de la fuerza policial, disfrazándose para las alcabalas. Una gran muralla los hace detenerse, ZONA CERO pintado en blanco, cubre todo el lateral de la estructura.
(Susurro)
Hemos llegado…
fuente
Un poco de desconcierto se observa al cruzar, varios oficiales intentando recuperarse y pequeños escombros de concreto, las capsulas de electrochoque del arma de Alexander creó.
(Sonriendo)
Sin duda, rastros de Henry.
ESC. 15: EXT. ENTRADA DE LA REPRESA. NOCHE.
Caos. Decenas de oficiales rodean la entrada de la represa, capturando a las 4 personas que estaban en las camionetas. Laila quiere brincar de entusiasmo, la fuerza policial ha picado el cebo. Su vista recorre el perímetro y no ve señales de Henry y Ruth, tampoco del camión de agua.
Oficial superior, Theo Duque,
con auxiliares, vamos a pasar.
Adelante, señor.
Área despejada, intrusos
serán llevados a la central.
Alexander hace un gesto militar de forma burlesca a las espaldas de Theo, mientras caminan a toda prisa hacía el recinto.
ESC. 16: INT. INTERIOR DE LA REPRESA. NOCHE.
Es oscuro, húmedo y poco iluminado, los pasillos son anchos llenos de gruesas tuberías que parecen vibrar de la presión con la que transportan el agua. Laila lleva su mano al intercomunicador de su oído y llama a Ruth.
Ubicación, R.
Repito, ubicación.
(OFF)
Tercera planta,
sección veintisiete…
¿Laila? Apresúrate.
Laila golpea el brazo de Alexander para llamar su atención, este se detiene mirando a de derecha a izquierda, sin saber donde ir.
Sé donde ir, tercera
planta, sección…
Veintisiete, ¡Vamos, síganme!
Sus pasos son rápidos ecos, ahogados uno y otra vez por el inmenso silencio que llena el lugar. Piernas moviéndose cada vez más altos en cada escalón hacía el tercer piso.
ESC. 17: EXT. TERCER NIVEL DE LA REPRESA. TARDE.
Ruth y Henry han posicionado la media tonelada de dinamita en cuatro secciones, al borde de la represa. Al encontrarse, se dan un breve saludo. Laila mira al cielo, extrañada por el desconocido clima. No se formaba una tormenta desde hace 20 años.
Es hora de apresurarnos,
la fuerza policial entrará
en cualquier momento para
inspeccionar.
(Burlón)
Escúchate, Oficial…
Ya eres un criminal.
Theo, empujarás el primer
saco de dinamita. Ruth,
Henry, Alex… A sus posiciones.
Cada uno de ellos corre hasta el bulto correspondiente de dinamita. Laila saca del bolsillo de su pantalón una pequeña tableta llena de botones y mira a Theo, él asiente y patea la dinamita, con los segundos suficientes para que Laila presione el botón y esta estalle, haciendo que sus pies sientan el temblor por la explosión.
(Gritando)
¡Ahora!
Ruth patea con fuerza la segunda carga de dinamita y se repite el proceso, Theo y Ruth corren a la puerta que está detrás de Alexander. Henry no espera el llamado, empuja con entusiasmo la tercera carga y segundos después, explota.
(Gritando)
Es hora, ¡Hazlo, nena!
fuente
La última carga de dinamita hace temblar con más fuerza el suelo y esta vez no se detiene, Laila lanza el control de las mini bombas y corre hacía la otra puerta, donde los demás la esperan. Los Oficiales irrumpen desde el otro extremo, apuntando a la espalda de Laila. Alexander observa la escena y al tenerla más cerca que los demás, ataja el cuerpo de Laila, esquivándola de la dirección del impacto y el arma de fuego haciendo eco en los oídos de todos.
Este es el penúltimo capitulo, ¡ya esta historia llegará a su fin! A los que me han leído, de verdad gracias por mantenerse allí conmigo ♥
También gracias a mi familia de @mosqueteros, son un pilar en mi y un divertido grupo. ♥
Agradecimiento a la gran comunidad de @cervantes por impulsar el contenido en español en esta plataforma.
Nos leemos pronto, cheers! ♥