
Los médicos no sugieren los tés hasta después de los 3-4 años. El niño no requiere de té para nutrirse.
Un bebe solo requiere de leche materna para alimentarse.
Los tés carecen de valor nutricional.
Algunos tés pueden ser tóxicos para ellos, por ejemplo anís, hinojo, te negro, te de canela. (Todos estos pueden inducir convulsiones).
Algunos tés pueden agravar problemas ya existentes en los niños como por ejemplo en caso de enfermedades del hígado o anemia.
Un bebe menor de 6 meses que toma te puede disminuir sus niveles de sodio en sangre y producirle convulsiones por un problema llamado hiponatremia (bajada del sodio en sangre).