Desde el día de ayer asumí un nuevo reto en mi vida... Empecé a gerenciar un local nocturno... Un poco de temor sentí con la responsabilidad sobre mis hombros pero sumamente confiado con el equipo de trabajo que estaba a mi alrededor... Gente comprometida con la excelencia del servicio y clientes difíciles pero terminamos la primera noche de forma excelente... estos atardeceder formarán parte de mi día a día, llenandome de fuerzas para así asumir con la mejor actitud una nueva jornada...