Con el término cuerpo extraño (CE), en Otorrinolaringología, nos referimos a cualquier elemento animado o inanimado introducido en forma voluntaria o accidental, dentro del oído, nariz o cavidades nasales, boca, faringe, laringe, tráquea o bronquios.
Estos pueden causar hasta 1000 muertes al año. Siendo el 75%, niños entre 2 y 5 años de edad. Estos son los más propensos a ser afectados, en vista de ser estar en permanente exploración del mundo que los rodea; se llevan todo a la boca y en conjunto con otros niños de la misma edad, se unen en travesuras para saciar su curiosidad. En una ocasión le pregunté a un paciente de 4 años ¿por qué se había introducido un grano de caraotas en el oído? y él me contestó “porque estaba aburrido”.
Esta misma semana tuve 3 pacientes con un CE en el oído. Ayer un niño de 2 de edad, es traído por su madre, porque se había introducido la noche anterior "granos arroz" en el oído derecho. La madre acude con él a emergencia, donde le intentan extraer el CE, no siendo exitosa la maniobra. Así que se presentó en mi consulta algo asustado y con dolor en el oído.
En un principio pensé que se trataba de simple cerumen, incluso al observarlo con el endoscopio; como es mi costumbre evalúo ambos oídos y también la nariz, para mi sorpresa ambos oídos tenían granos de arroz.
Al extraerlos esto fue lo que encontré: dos piezas de arroz en el oído izquierdo de medio milimetro y una de mayor longitud, casi un centrímetro, en el oído derecho.
Afortunadamente, no hubo daños en la membrana timpánica ni el conducto auditivo externo (CAE) del oído del paciente, y solo ameritó antiinflamatorios y gotas óticas.
Estos episodios son muy frecuentes en los niños, veamos cuáles son las causas, síntomas, tratamiento y cómo podría actuar usted ante un CE en nariz y oídos.
Causas más comunes
Como les decía al inicio, en el caso de los niños la causa principal es la curiosidad o travesura. En el caso de los adultos, lo más común es el uso de hisopos para limpiar el conducto auditivo; y se les puede quedar el algodón en el interior del mismo. De igual forma, se introducen objetos como papel higiénico en las fosas nasales si tienen hemorragia (epistaxis) o rinorrea abundante (moco nasal).
Es importante acotar, que cuando se trata de un cuerpo extraño en fosas nasales, estos pueden migrar hacia el interior de la nariz, por el mismo efecto del aire inspirado, lo que puede generar una verdadera emergencia, al provocar insuficiencia respiratoria y causar la muerte.
Aunque no es el motivo del post, debo mencionar que en los niños, las monedas son los cuerpos extraños más frecuentes en esófago y las semillas en tráquea y bronquios. En el caso de los adultos los más frecuentes son huesos de pollo o pescado y trozos de carne.
Clasificacion de cuerpos extraños en nariz y oídos
Los cuerpos extraños en oídos se dividen en líneas generales en animados e inanimados y estos a su vez en inertes y no inertes.
Dentro de los animados los más frecuentes son las cucarachas, zancudos, jejenes, moscas y hormigas.
Inertes: cuentas de collares, piezas de juguetes, botones, restos de bastoncillos, materiales de relleno de almohadas y muebles, foami, piedras, entre otros.
No inertes: semillas de vegetales y químicos como baterías de relojes, calculadoras y auxiliares auditivos. Estas baterías son muy peligrosas porque liberan sustancias como óxido de mercurio, dióxido de magnesio, hidróxido de potasio y de zinc, los cuales interaccionan con el tejido circundante y generan licuefacción del mismo, provocando lesiones que al cicatrizar pueden producir sinequias (uniones) o perforaciones en la nariz y estenosis en el oído.
Sintomatología
Generalmente son asintomáticos. Los cuerpos extraños en oídos pueden producir otalgia y otorragia, por lesión de la piel del conducto; hipoacusia si el elemento ocluye totalmente el CAE y otitis externa por sobreinfección bacteriana.
De acuerdo a casos específicos tenemos que:
- Las pilas alcalinas producen necrosis por licuefacción
- Las semillas se hidratan progresivamente y aumentan de tamaño
- Los insectos producen acúfenos intensos, al moverse dentro del conducto
Con respecto a la nariz en las primeras horas no hay síntomas, luego pueden aparecer, obstrucción nasal y dolor. El signo más característico es la rinorrea unilateral fétida. En un niño con esta sintomatología lo primero que debemos pensar es en un cuerpo extraño intranasal. Puede incluso ocurrir que se trate como rinosinusitis y al cabo de unos años se descubra de forma incidental y puede hallarse como una verdadera piedra llamada rinolito, porque se cubre de sales de calcio y magnesio.
Diagnóstico
Es difícil muchas veces que el niño mencione que tiene “algo en el oído o nariz” a menos que le duela o le moleste; entonces hay que empezar a atar cabos para dilucidar si antes de empezar a llorar estaba jugando con algún objeto. Es importante también, al momento de examinar, revisar los dos oídos, así como las dos fosas nasales, porque en mi experiencia personal, los niños suelen introducir objetos en ambos sitios.
Tal como sucedió con nuestro paciente de 2 años de edad, quien refirió a su madre que introdujo arroz en el oído izquierdo, pero al evaluarlo, tenía arroz en ambos oídos.
Casi siempre se diagnóstica con el uso de otoscopio en el caso del oído y con un rinoscopio o espéculo nasal, en el caso de las fosas nasales. De estos últimos, la mayoría se hallan en el vestíbulo nasal y en el meato inferior.
Otras veces es necesario realizar una endoscopia rígida o flexible, sobretodo en aquellos pacientes que han acudido con otros médicos y no han podido extraer el objeto, y encontramos sangre o los tejidos edematizados.
Con respecto a los estudios por imágenes, las radiografías de senos paranasales, están indicadas en el caso de ser un cuerpo extraño metálico, o si ha pasado mucho tiempo y se formó un rinolito; y la tomografía se reserva ante la sospecha de alguna complicación. Se debe hacer un diagnóstico diferencial con rinosinusitis, pólipos nasales y atresia de coanas.
Tratamiento
Hay que usar el material adecuado, instrumental y pinzas especiales para ello, pues al intentar extraer el CE, puede introducirse más y empeorar la situación.
Muchas veces es necesario sedar al paciente e incluso llevarlo a quirófano para extraerlo bajo sedación o anestesia. Usualmente, los pacientes con CE, son llevados rápidamente a consulta de emergencia, por lo que llevan pocas horas en nariz u oído; por tanto, solo requieren de gotas nasales u óticas con antibióticos, antiinflamatorios y solución fisiológica en el caso de la nariz. Si el paciente lleva mayor tiempo con el CE, suele ameritar antibióticos orales o parenterales, con o sin hospitalización.
Si usted no es médico, o es un médico que se encuentra en un lugar alejado sin instrumental adecuado y le llega un paciente con un insecto en el oído, lo puede inmovilizar con aceite mineral o glicerina, para evitar la desesperación en el paciente. Cuando se trate de semillas, puedes usar alcohol para deshidratarla ¡Jamás coloque agua a las semillas porque se hidratan y crecen! Envíe al paciente al centro de salud más cercano.
Complicaciones
La mayoría de veces las complicaciones surgen al no usar instrumental adecuado, las más comunes son:
- Desgarros en el conducto auditivo externo, los cuales, cicatrizan sin problemas al cabo de unos días
- Perforación timpánica con lesión de la cadena de huesecillos, con la subsecuente hipoacusia, mareos e incluso fístula perilinfática. Si es una perforación timpánica pequeña, al cabo de un mes cierre sin problemas, pero hay que valorar al paciente para detectar signos de infección o alarma.
- Las baterías o pilas alcalinas suelen ser muy peligrosas tanto en nariz como en oídos, porque generan una necrosis por licuefacción, es decir, destrucción del tejido que al cicatrizar puede producir sinequias o estenosis del área afectada.
Discusión
Los CE son muy frecuentes en los niños pequeños. Por ello, los padres, representantes o personal al cuidado de los mismos, deben estar atentos ante la posibilidad de ocurrencia de estos episodios, pues lamentablemente puede que una travesura represente un verdadero riesgo para la vida del infante.
Es importante destacar que dependiendo de la localización del cuerpo extraño, será necesario actuar con mayor premura, tal es el caso de las fosas nasales, pues el elemento u objeto puede migrar hasta la faringolaringe y provocar obstrucción de la vía aérea.
Esto también puede suceder si personas o médicos no entrenados, intentan extraer el cuerpo extraño sin el instrumental adecuado o si el paciente no colabora con el procedimiento.
Un cuerpo extraño irregular, puntiagudo o demasiado duro puede requerir de mayor paciencia para extraerlo, o incluso ameritar llevar el paciente a quirófano, para evitar complicaciones.
Referencias
- Vera, V. (2006). Cuerpos extraños en Otorrinopediatría. V Manual de Otorrinolaringología de la IAPO.
Nota: Todas las imágenes, fotografías y separador son de la autora
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