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Welcome to my Blog

Greetings to all the mommies and daddies that make life in the #Motherhood community, I hope everyone here is doing great. When my son Santiago was born my dream was to be able to offer him my breasts and for him to feed exclusively with his breast milk, the first weeks of my baby's life were hard for both of us, first of all because the so appreciated milk did not appear, as a mother I felt dejected because I wanted to feed my baby and emotionally I was affected with all this process, Secondly, my son also suffered from sucking the breast and not extracting the colostrum, to this was added the inexperience of a first time mother and with the need to feed my baby, my husband and I made the decision to feed him with baby formulas and continue giving him the breast until he was able to extract his first milk.

Advice on what to do to get the first milk came from everywhere, my sisters, aunts, sisters-in-law, my mother-in-law all recommended drinking lots of water, lots of juices, putting compresses on my breasts, combing my breasts, and any kind of strange things that beyond working, left me sentimentally affected and with the feeling that I was not good enough to be able to feed my baby. I even went to the maternity milk bank so they could help me pump my milk and the result was even more depressing.

I continued to breastfeed my son and prayed and prayed to God that he would be able to express his milk. Among so many things, my sister who supported me in this whole process could see how bad we were both going through, so she went in search of a local doctor and took her home to evaluate me, the doctor was a super young girl of about 23 or maybe 24 years old, but with an innate confidence and with a lot of character, She told me what no one else had told me so far, she started talking to me about my emotional blockage, the milk was there, ready for my baby, but my fear of failure had me blocked and I had to get rid of that chip, and on the other hand, I had to do some exercises to release the ducts in my breasts.

So I started to do my exercises according to her instructions. I took my breasts with my index finger and thumb and did some pressure from the base of my breasts to the beginning of my auroleas, twice I tried it and I could see a small sign of some liquid, the doctor examined me, told me about the appearance of the first colostrum and then asked me to breastfeed the baby, You can't imagine how many times I thanked the doctor (taking her time, going to our home, unblocking my feelings of guilt and also my fears, and making it possible for me to express my baby's milk myself, all this is a reason to thank her for the rest of my life). From that moment until now with my son Santiago, who is a little more than 2 years old, we are still breastfeeding, without interfering in his daily diet of fruits, meats and vegetables.

The bond of love between my son and me is very big, I have been breastfeeding for two years and maintaining that special connection full of baby smell in my chest, in my heart and in my soul. I try to feed and be healthy for my son, although breastfeeding is also a complicated task, as a mom I know that my body has been resisting, sometimes my back hurts a lot, my waist, my hair falls apart, my nails are more fragile and brittle. Even so, I think about how beautiful it is to see my son attached to his teat, our most noble bond of love, touching his face, smelling his hair, hugging and kissing him, what I would least like is to see him cry for not having his milk, and we both need our warmth, weaning for my son is a task that I do not know how soon it will happen and that will only happen when both, baby and mommy are willing to leave the teat.

As a mom, I can say that these are two complicated tasks, breastfeeding was a difficult process in which I had to see my newborn son cry for not having my breasts at his disposal and emotionally it was difficult. Now, at this point, when my son is grown, I know that weaning will inevitably take place at any moment, and I would like this transition to be as kind as possible for my baby and also for me, without affecting our feelings.

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Lactancia y destete: Tareas complicadas que involucra los sentimientos de bebé y mamá.

Saludos para todas las mamitas y papitos que hacen vida en la comunidad de #Motherhood, espero que todos por acá se encuentren fenomenalmente bien. Cuando mi hijo Santiago nació mi sueño era poder ofrecerle mis pechos y que el se alimentara exclusivamente con su leche materna, las primeras semanas de vida de mi bebé fueron duras para ambos, en primer lugar porque la tan apreciada leche no aparecía, como madre me sentía abatida porque deseaba alimentar a mi bebé y emocionalmente estaba afectada con todo este proceso, y en segundo lugar, mi hijo también sufría al succionar el pecho y no extraer el calostro, a esto se le sumaba la inexperiencia de una madre primeriza y ante la necesidad de alimentar a mi bebé, mi esposo y yo tomamos la decisión de alimentarlo con fórmulas para bebé y continuar dandole su pecho hasta que el lograra extraer su primera lechita.

Los consejos sobre que hacer para que la primera lechita apareciera llegaron de todos lados, mis hermanas, tías, cuñadas, mi suegra todas me recomendaban tomar mucha agua, una gran cantidad de jugos, colocarme compresas en los senos, peinar mis pechos, y cualquier tipo de cosas extrañas que más allá de funcionar, me dejaban sentimentalmente afectada y con la sensación de no ser suficientemente buena como para poder alimentar a mi bebé. Incluso, fui al banco de leche de la maternidad para que con un extractor me pudieran ayudar a extraer la leche y el resultado fue negativamente más deprimente aún.

Yo continuaba colocandole el pecho a mi hijo y oraba y pedía a Dios para que el pudiera extraer su lechita. Entre tantas cosas, mi hermana quién me apoyó en todo este proceso podía notar lo mal que ambos la estabamos pasando, así que fue en busqueda de una doctora local y la llevó a casa para que me evaluara, la doctora era una chica súper joven de unos 23 o tal vez 24 años, pero con una seguridad innata y con mucho carácter, ella me dijo lo que nadie más me había dicho hasta el momento, comenzó hablandome de mi bloqueo emocional, la leche estaba ahí, dispuesta para mi bebé, pero mi temor a fracasar me tenía bloqueada y me tenía que quitar ese chip, y por otro lado, debía hacer algunos ejercicios para liberar los conductos en mis pechos.

Así que comence a hacer mis ejecicios según sus indicaciones. Tomaba mis pechos con los dedos índice y pulgar y hacía algo de presión desde la base de mis pechos hasta el inicio de mis auroleas, dos veces lo intenté y pude ver una pequeña señal de algo líquido, la doctora me examinó, me hablo de la aparición del primer calostro y luego pidió que le diera pecho a bebé, ni se imaginan todas las veces que agradecí a la doctora (tomarse su tiempo, ir hasta nuestro hogar, desbloquear mis sentimientos de culpa y también mis temores, además hacer que yo mismas pudiera extraer la lechita de mi bebito, todo eso es motivo para agradecerle toda mi vida). Desde ese momento, hasta la actualidad ya con mi hijo Santiago de poco más de 2 años de edad aún continuamos en etapa de lactancia, sin que interfiera en su alimentación diaria de frutas, cernes y vegetales.

El vínculo de amor entre mi hijo y yo es muy grande, son dos años dando teta y manteniendo esa conexión especial llena de olor a bebé en mi pecho, en mi corazón y en mi alma. Trato de alimentarme y estar saludable para mi hijo, aunque también amamantar es una tarea complicada, como mamá se que mi cuerpo ha estado resistiendo, en ocasiones me duele muchísimo la espalda, mi cintura, mi cabello se cae a pedazos, mis uñas son más frágiles y quebradizas. Aún así, pienso en todo lo hermoso que es ver a mi hijo pegado de su tetica, nuestro más noble vínculo de amor, tocar su carita, oler su cabellito, abrazarlo y besarlo, lo que menos me gustaría es verlo llorar por no tener sus tomas de leches, y ambos necesitamos nuestro calor, el destete para mi hijo es una terea que no se que tan próxima esté en suceder y que solo ocurrirá cuando ambos, bebé y mamita estemos dispuestos a dejar la teta.

Cómo mamá, puedo decir que estás son dos tareas complicadas, lactar fue un proceso difícil en el que me tocó ver a mi hijo recién nacido llorar por no tener mis pechos a su disposición y emocionalmente fue difícil. Ahora, en este momento, cuando mi hijo ya está grande se que inevitablemente el destete tendrá lugar en cualquier momento, y está transición me gustaría que fuera lo más amable posible para mi bebé y también para mí, sin que nuestros sentimiemtos se vean afectados.

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