Hoy me desperté con una energía renovada y muchas ganas de realizar una ruta de 10 kilómetros. La emoción de salir a correr era indescriptible ya que el día de ayer nos echo la broma el clima lluvioso, así que, para prepararme, decidí disfrutar de una deliciosa fruta junto con un té de jengibre. Este último siempre me da ese empujón extra que necesito para empezar bien el día.
Después de mi pequeño desayuno, me alisté con mi ropa deportiva y calzado, una vez listo para estw recorrido. Al salir, noté que el cielo estaba despejado, aunque la vía estaba un poco húmeda por la lluvia. No me dejé intimidar porqué después de todo, una pequeña humedad no puede detenerme.
Comencé el primer kilómetro a un ritmo suave, con mucha precaución. Quería asegurarme de que mi cuerpo se adaptara correctamente y no forzarme demasiado al principio. Escuchar a mi cuerpo es clave, especialmente en rutas más largas. A medida que avanzaba, fui incrementando progresivamente mi ritmo. La sensación de libertad que brinda correr al aire libre siempre me fascina, y hoy no fue la excepción.
La línea costera también contribuía a mi motivación, todo el paisaje muy lindo. Cada kilómetro recorrido me llenaba de satisfacción y me hacía sentir más fuerte.
Finalmente, logré completar no solo los 10 kilómetros planificados, sino que me sorprendí al terminar con un total de 11 kilómetros, manteniendo un ritmo promedio de 5:31 por kilómetro. Al llegar a mi casa, me sentí increíblemente feliz y realizado. Sin duda, una mañana perfecta llena de movimiento y bienestar.
Today I woke up with renewed energy and a lot of desire to run a 10 kilometer route. The excitement of going out for a run was indescribable since yesterday we were teased by the rainy weather, so, to prepare myself, I decided to enjoy a delicious fruit along with a ginger tea. The latter always gives me that extra boost I need to start the day off right.
After my small breakfast, I got ready with my sports clothes and shoes, once I was ready for this run. On the way out, I noticed that the sky was clear, although the road was a bit wet from the rain. I was not intimidated because after all, a little humidity can't stop me.
I started the first kilometer at a gentle pace, with a lot of caution. I wanted to make sure my body adapted correctly and not push myself too hard at the beginning. Listening to my body is key, especially on longer routes. As I went along, I progressively increased my pace. The feeling of freedom that running outdoors brings always fascinates me, and today was no exception.
The coastline also contributed to my motivation, all the scenery was beautiful. Every kilometer I ran filled me with satisfaction and made me feel stronger.
Finally, I managed to complete not only the planned 10 kilometers, but I surprised myself by finishing with a total of 11 kilometers, keeping an average pace of 5:31 per kilometer. Upon arriving home, I felt incredibly happy and accomplished. Upon arriving home, I felt incredibly happy and accomplished. Without a doubt, a perfect morning full of movement and well-being.