Un domingo lleno de un clima espectacular se presentó como la oportunidad ideal para realizar una ruta larga. Junto a mi esposa y algunos amigos corredores, planificamos recorrer 15 kilómetros a un ritmo relajado. Al llegar al punto de concentración, inicié un calentamiento dinámico mientras esperábamos la llegada de los compañeros. Poco a poco, todos comenzaron a llegar, llenos de entusiasmo y listos para disfrutar de la jornada.
El cielo estaba cubierto y el clima nos daba sensación de lluvia, pero eso no detuvo nuestros planes. Una vez que todos estuvimos listos, Verificamos nuestras aplicaciones de carrera, y nos alineamos para comenzar la ruta y disfrutar del momento y compartir experiencias, sin la presión de un cronómetro.
Mientras me adaptaba al ritmo, fui conversando con una amiga sobre el clima que ya estaba despejándose y de los próximos eventos de running que ella quiere participar. Hablamos sobre cómo cada carrera tiene su propio encanto y desafíos, así como la importancia de aprender de cada experiencia.
A pesar que no estoy siguiendo un plan de entrenamiento, siempre me estoy entrenado por si llega la oportunidad de inscribirme en una carrera, ya estoy listo para adaptar algún plan. Sin embargo, durante el recorrido noté que mis piernas respondían fino, y aunque el terreno se tornaba un poco resbaladizo por las lluvias de la madrugada, eso solo le daba un toque especial a la aventura.
Al final conquisté esta ruta con 16.7 km, también fortalecí mis lazos de amistad. Compartiendo risas y anécdotas con los compañeros.
A Perfect Sunday for Team Running.
A Sunday full of spectacular weather presented itself as the ideal opportunity for a long run. Together with my wife and some running friends, we planned to run 15 kilometers at a relaxed pace. Arriving at the meeting point, I started a dynamic warm-up while we waited for our companions to arrive. Little by little, everyone began to arrive, full of enthusiasm and ready to enjoy the day.
The sky was overcast and the weather felt like rain, but that didn't stop our plans. Once we were all ready, we checked our race applications, and lined up to start the route and enjoy the moment and share experiences, without the pressure of a stopwatch.
As I settled into the rhythm, I was chatting with a friend about the weather that was already clearing up and the upcoming running events she wants to participate in. We talked about how each race has its own charm and challenges, as well as the importance of learning from each experience.
Even though I am not following a training plan, I am always training myself in case the opportunity to sign up for a race comes along, I am already ready to adapt some plan. However, during the ride I noticed that my legs responded well, and although the terrain was a bit slippery due to the early morning rains, it just added a special touch to the adventure.
In the end I conquered this route with 16.7 km, I also strengthened my bonds of friendship. Sharing laughs and anecdotes with my companions.