Hoy estuvo genial la tarde para correr 8 kilómetros de relajación, buscando disfrutar del aire libre y desconectar un poco. Antes de comenzar realicé mi rutina de calentamiento.
Sin embargo, al iniciar el primer kilómetro, sentí una ligera molestia en el pecho. En esos momentos, hubo un pequeño susurro de duda que cruzo por mi mente, pero decidí continuar. Con cada paso, traté de escuchar a mi cuerpo, consciente de la importancia de no forzarlo si algo no se sentía bien. A medida que avanzaba, la molestia comenzó a desvanecerse y, para mi sorpresa, en el tercer kilómetro ya no la sentía. Fue un alivio y, sobre todo, una motivación para continuar adelante.
Con el ánimo en alza, decidí aumentar el ritmo. Me encanta esa sensación de libertad y poder que da el correr. Progresivamente, fui sintiendo cómo mis piernas respondían y me empujaban hacia adelante. Cada kilómetro los disfruté al máximo, y al llegar al octavo, experimenté una mezcla de satisfacción y felicidad.
Una vez en casa, junto ai esposa completé mi entrenamiento con estiramientos, sabiendo que esta parte es tan importante como la carrera misma. Cuidar de nuestro cuerpo es esencial para seguir disfrutando este proceso.
Cada día es una nueva oportunidad para aprender y crecer. Hoy no solo corrí 8 kilómetros; también escuché a mi cuerpo y aprendí a confiar en él. 💪🔥🏃🔥🏃💪
Today was a great afternoon to run 8 kilometers of relaxation, looking to enjoy the outdoors and disconnect a little. Before starting I did a warm up routine.
However, as I started the first kilometer, I felt a slight discomfort in my chest. In those moments, there was a small whisper of doubt that crossed my mind, but I decided to continue. With each step, I tried to listen to my body, aware of the importance of not forcing it if something didn't feel right. As I progressed, the discomfort began to fade and, to my surprise, by the third kilometer I no longer felt it. It was a relief and, more importantly, a motivation to keep going.
With my spirits up, I decided to increase the pace. I love that feeling of freedom and power that running gives. Progressively, I felt my legs responding and pushing me forward. I enjoyed every kilometer to the fullest, and when I reached the eighth, I experienced a mixture of satisfaction and happiness.
Once home, together with my wife, I completed my training with stretching, knowing that this part is as important as the race itself. Taking care of our body is essential to continue enjoying this process.
Every day is a new opportunity to learn and grow. Today I didn't just run 8 kilometers; I also listened to my body and learned to trust it.💪🔥🏃🔥🏃💪